José Julián Romero: "Esto es una cortina de humo para proteger a algunos"

El empresario granadino José Julián Romero, que junto a la anterior cúpula de Urbanismo va a ser enjuiciado por supuesta prevaricación en la operación urbanística del Cerrillo de Maracena, ha defendido su inocencia públicamente y ha culpado de las irregularidades cometidas al alcalde de la ciudad, José Torres Hurtado, y a la actual concejal de Urbanismo, Isabel Nieto.

Después de conocerse el escrito de acusación de la Fiscalía, en el que el Ministerio público pide ocho años de inhabilitación para el anterior concejal de Urbanismo, Luis Gerardo García-Royo (PP), varios técnicos de la Gerencia municipal y los dos empresarios Rodríguez Acosta y Julián Romero, éste último decidió dar ayer una comparecencia pública ante los medios para explicar el caso desde su punto de vista.

Según la versión del promotor, ninguno de los que firmó el convenio, en el que se preveía que el Ayuntamiento vendiera unidades de aprovechamiento urbanístico a los promotores firmantes (sin ser municipal parte de ese suelo), estaba colaborando en nada fraudulento. Para Julián Romero, las irregularidades parten de la aprobación del Plan de Reparcelación, en julio de 2007, justo después de las elecciones municipales en las que García-Royo deja de ser concejal de Urbanismo y es sustituido por Isabel Nieto. Por tanto, el empresario acusa directamente al alcalde, José Torres Hurtado, y a la edil de las responsabilidades que se puedan derivar de la venta de metros edificables que no eran municipales.

"Yo no he comprado jamás un metro que no sea legal", declaró ayer el empresario, que pide tiempo para que la Justicia aclare esta situación antes de ser juzgado públicamente. "Como persona se me debe un respeto", agregó.

Julián Romero siempre ha mantenido graves diferencias personales con el anterior concejal García-Royo, lo que lo llevó incluso a ser condenado por injurias al ex edil popular. Sin embargo, en esta ocasión en la que van a ser enjuiciados por colaborar en el mismo delito, el promotor defiende la actuación del político. "En otras cosas no ha sido así, pero en esto García-Royo no ha hecho nada ilegal". Con estas palabras el promotor trató de exonerar al ex edil de la responsabilidad de lo ocurrido, mientras culpaba de todo ello al gobierno municipal actual, en especial al alcalde y la edil de Urbanismo.

"Todo esto es una cortina de humo para proteger a quien a sabiendas de que los metros no son suyos quiere perjudicar a Comarex y a JJ Consulting".

Julián Romero hizo hincapié en que no ha llegado a comprarle al Ayuntamiento esos metros que no le correspondían (son del Estado o de otros particulares) y que precisamente por ello ha sufrido un embargo de todos sus bienes: "Me trataron de arruinar y no lo consiguieron. Por ahora sigo vivo". En efecto, el Ayuntamiento ha requerido al promotor el pago de sus compromisos de compra (adquiridos en el convenio que firmó con García-Royo) y por la negativa de este a abonar ese dinero, el municipio inició un embargo que más tarde se solucionó cuando el Ayuntamiento encontró un nuevo comprador para esos terrenos y cerró un nuevo convenio con esta empresa.

El promotor acusado de prevaricación ha aportado las pruebas de que él mismo alertó al Ayuntamiento de estas irregularidades, que puso una denuncia en octubre de 2010 y que lo puso en conocimiento del anterior subdelegado del Gobierno, administración que ha iniciado la denuncia del pleito actual por la apropiación y venta irregulares de los metros que le pertenecían en el Cerrillo de Maracena.

2010