Juegos de Senegal y Pakistán para los niños de la zona Norte
Descubrir juegos del otro lado del mundo y aprender a la vez que el intercambio cultural es una fuente de riqueza son los objetivos principales de un proyecto que lleva a cabo un grupo de inmigrantes, con el apoyo de Cruz Roja, en la zona Norte de la capital granadina. Dos centros educativos, el colegio Luisa de Marillac y el instituto La Paz, acogen esta actividad, titulada Jugando compartimos, en la que los niños aprenden juegos de Senegal y de Pakistán, que son los lugares de origen de los inmigrantes.
El gartombe, en el que un grupo se mete dentro de un círculo dibujado en el suelo y el equipo contrincante tiene que intentar sacarlo, o el juego de las bolas, en el que si la pelota cae en el círculo de un jugador, éste tiene que tirársela a otro, son algunos de los entretenimientos que descubren los escolares, que también enseñan a su vez a los inmigrantes los juegos típicos de España.
"Se trata de trabajar la integración a través del juego", resume una de las dinamizadoras de la actividad del equipo de Cruz Roja, Pilar Amor, que avanza que a principios del año que viene está previsto organizar esta misma actividad en un espacio abierto para invitar a todos los centros educativos y añade que también se va a grabar un DVD que sirva como material educativo.
Además, dentro de la actividad también se dedica una parte de los encuentros al intercambio lingüístico, explica uno de los inmigrantes, Mouhameth Sourang, que ha enseñado a los escolares cómo se saluda o se despide la gente en su país, Senegal, y ha aprendido algunas palabras de calé.
"Se trata de sensibilizar a los niños y que sepan lo que es un inmigrante y conozcan un poco nuestra cultura", afirma Sourang, que cuenta cómo, para empezar, les enseñan a los niños un gran mapa del mundo y les muestran desde dónde han venido hasta España. Esta iniciativa, que organiza Cruz Roja Granada, se enmarca dentro del Plan Piloto de Actuación Integral en zonas sensibles de Andalucía con presencia significativa de población inmigrante, y está financiado por el Fondo Europeo para la Integración, el Ministerio de Trabajo e Inmigración y la Consejería de Empleo de la Junta, además de contar con la colaboración del Ayuntamiento.
El coordinador del Plan, Sergio Ortuño, explica que dentro del trabajo que realizan con la población emigrada han observado una inquietud cultural que se ha concretado en actividades como estas.
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