La delegada territorial en Granada de la Consejería de Empleo, Formación y Trabajo Autónomo, Virginia Fernández, ha confirmado que se ha publicado en la web de la Consejería de Empleo la concesión a los ayuntamientos y entidades locales de Granada que pueden acogerse al novedoso programa de Formación para el Empleo, alternativo a las escuelas taller y talleres de empleo, que contará con una dotación de 2.887.007 euros. “Este nuevo programa mejora sustancialmente el de las antiguas escuelas taller y talleres de empleo, que tenían bajos niveles de inserción y escasa adaptación a las necesidades del mercado laboral”, indicó.

El programa, diseñado por la Consejería de Empleo, Formación y Trabajo Autónomo de la Junta de Andalucía, beneficiará a 110 personas, y tiene como principal novedad que el alumnado sea contratado desde el inicio de los proyectos, que durarán 12 meses, percibiendo el salario establecido por convenio y nunca por debajo del salario mínimo interprofesional. En las antiguas escuelas taller, existía una fase de formación inicial seguida de una fase de alternancia, momento en el que el alumnado era contratado.

La Diputación Provincial, con dos acciones formativas aprobadas, la Agencia OAL de Huétor Tájar y los ayuntamientos de Huéscar, Benalúa, La Peza y La Zubia, son las entidades beneficiarias definitivas, al cumplir en tiempo y forma los requisitos de la convocatoria publicada en el BOJA el pasado 8 de octubre, donde se fijaba, entre otros, el plazo de solicitud, que finalizó el día 24 del mismo mes. Las subvenciones para las iniciativas que realicen las entidades se han resuelto en régimen de concurrencia competitiva y tienen doce meses de duración.

Taller de Baza

Virginia Fernández ha mostrado su “extrañeza” por la respuesta del Ayuntamiento de Baza al conocer que la solicitud que realizó para un taller de empleo haya sido desestimada. “Hemos sido exquisitos en la convocatoria y en el cumplimiento de los plazos, y otros municipios no han tenido problemas cuando se les ha requerido para que subsanasen la documentación. Al Ayuntamiento de Baza, como a otros consistorios municipales, se le requirió una subsanación en la documentación presentada”, ha dicho.

Según ella, en el Ayuntamiento de Baza “ha fallado algo al no contestar en plazo al requerimiento”, y las alegaciones presentadas posteriormente tras la desestimación “se basan en supuestos que no tienen encaje en las bases de la convocatoria”. Aún así, ha animado al Ayuntamiento bastetano a que concurra a una próxima convocatoria de este programa de formación y empleo.

Los proyectos presentados por la entidades están dirigidos a mejorar las posibilidades de inserción laboral de las personas participantes, y consisten en una actividad de utilidad pública o de interés general y social que posibiliten alumnado la realización de una práctica en alternancia con la formación profesional para el empleo, que esté relacionada directamente con dicha práctica. En cualquier caso, el tiempo dedicado a la actividad formativa no pdrá ser inferior a un 25% del total de horas de cada contrato para la formación y el aprendizaje.

Las entidades diseñan los proyectos

Estas iniciativas de Formación y Empleo están diseñadas por las propias entidades solicitantes, teniendo como punto de partida las necesidades formativas del mercado laboral del territorio donde se desarrolle, y las personas destinatarias finales de estos proyectos deberán estar inscritos en el Servicio Público de Empleo en situación laboral de no ocupadas.

Las acciones formativas de la Diputación Provincial se centran en la agricultura ecológica; la OAL de Huétor Tájar en la horticultura y floricultura; el Ayuntamiento de Huéscar en la albañilería y la carpintería; el de Benalúa en la atención sociosanitaria y los municipios de La Peza y La Zubia en el mantenimiento de jardines y zonas verdes.

Este nuevo programa formativo, que incluye al menos un certificado completo de profesionalidad y en algunos casos incluso dos, está en línea con la nueva normativa que acaba de publicar el Ministerio de Trabajo y Economía Social, en la que se regulan los programa experienciales que alternan empleo y formación y destierran los conceptos de escuelas taller y talleres de empleo.