La nueva ley de Policías Locales de Andalucía se debate este miércoles en Pleno del Parlamento Andaluz. Una ley que regulará las plantillas y los cuerpos policiales y que esperan los 1.200 agentes policiales repartidos por los municipios de la provincia para adaptar su día a día. Porque incluirá novedades, como la figura del auxiliar de Policía, uno de los puntos más controvertidos, o el cambio en la estructura de mando para reducir cargos. Además, se cambiarán protocolos de forma que un municipio mayor podrá compartir agentes con municipios pequeños cercanos. 

Fue a comienzos de marzo cuando el Consejo de Gobierno aprobó el proyecto de ley, con el que pretende resolver y actualizar cuestiones tras 20 años de vigencia de la actual norma.

Entre las novedades, exigir un mínimo de 5 agentes en todos los cuerpos de Policía Local (ahora no hay mínimo y hay muchos pequeños municipios con un único funcionario) o la obligación de que todos los municipios con 5.000 habitantes o más tengan su propio Cuerpo. Además, se contempla la "asociación de municipios" cuando dos o más limítrofes no dispongan de recursos suficientes por separado. 

La labor de patrulla también puede cambiar y se promoverán patrullas compuestas por más de un agente o en colaboración con otras fuerzas de seguridad. 

En cuanto a la organización interna, se reducen categorías. Desaparece así la figura de superintendente en la escala técnica y la de intendente mayor pasa a denominarse intendente principal. El objetivo es alcanzar la "homogeneidad" en las escalas con dos categorías. En la escala técnica un intendente principal e intendente; en la ejecutiva un inspector y subinspector y en la básica, oficial y policía. Además, se regulará un nuevo procedimiento para la cobertura del puesto de jefe del cuerpo.

Después hay otras medidas como criterios de proporcionalidad entre categorías, fomento de la igualdad de género, mejora de la prevención de riesgos laborales o procedimientos tecnológicos. También se modificarán los requisitos para la movilidad para evitar prácticas abusivas y las permutas y comisiones de servicio.

La ley recoge también que el personal funcionario jubilado mantendrá la condición de policía jubilado con la categoría que tuviese en el momento de la jubilación y podrá vestir el uniforme en actos instituciones y sociales solemnes y disponer de carné profesional y conservar la placa.

Otro asunto que se incluye es la organización de oposiciones. La ley promoverá la convocatoria unificada por parte de la Junta para facilitar a los ayuntamientos este tipo de procesos y establecer mayores garantías en la colocación de efectivos. El nuevo texto logra el objetivo de reconocer entre los policías locales de cada cuerpo la capacidad para asumir la jefatura de su municipio o el de otro dentro de la comunidad autónoma. Para ello, se apuesta por la alta cualificación alcanzada por las últimas promociones formadas en el Iespa.

Por otro lado, se regulará la figura del vigilante municipal con el objetivo de diferenciar sus funciones, ámbito de actuación y régimen estatutario respecto a la del Policía Local.

Ante el debate en sede parlamentaria, la Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) en Granada, considera que el proyecto de Ley "sienta las bases para hacer más seguros los municipios y para que los policías se doten de mejores medios materiales y garantías en el acceso a la carrera profesional, si bien confía en que se mejore el texto durante su trámite en la Cámara autonómica".

El responsable de Administración Local de CSIF Granada, Ignacio Conde, ha explicado que el texto del proyecto de Ley recoge “una parte importante de las reivindicaciones que llevamos negociando más de diez años y que viene a modernizar una ley obsoleta que se aprobó hace más de 20 años y que, por lo tanto, no da respuesta a la situación actual de las plantillas de agentes, ni desde el punto de vista organizativo ni de desarrollo profesional”.

Además, CSIF entiende “muy positivo” que la nueva ley abra la posibilidad de la opción voluntaria de la convocatoria unificada de plazas de Policías Locales, de tal manera que facilita a los ayuntamientos la posibilidad de realizar las convocatorias que estimen oportunas.

Por otra parte, el sindicato ha mostrado su rechazo a que la futura ley pueda incluir la figura de auxiliar de policía, tal y como se pretende desde algunos ámbitos, “ya que provocaría la desprofesionalización y precarización de las plantillas policiales”.

Entre los cambios que contempla la nueva Ley destaca que los municipios con 5.000 habitantes o más tengan un cuerpo de policía local compuesto por cinco agentes como mínimo. En cuanto a las localidades con menos de esa población, podrán asociarse con otros municipios limítrofes para la prestación conjunta de este servicio si por separado no disponen de recursos suficientes para tener su propio cuerpo de policía local.

Granada cuenta actualmente con algo más de 1.200 policías locales distribuidos en toda la provincia, aunque todavía hay algunas localidades granadinas que no disponen de esta plantilla.