"Lorente se va a encontrar un instituto muy estabilizado"

Se siente satisfecha de haber conseguido acercar los forenses al ciudadano, de haber impulsado importantes cambios en la dinámica del trabajo que desarrolla su colectivo y de haber logrado que su equipo haya acudido a trabajar a diario con una sonrisa. María Dolores Calvo (Granada, 1967) ha sido directora del Instituto de Medicina Legal (IML) en Granada los últimos seis años y medio y, ahora, tras su cese, regresa a Málaga, donde tiene su plaza de forense. Se va con cierta tristeza por lo que deja aquí, pero con la sensación que haber cumplido su misión. No guarda ningún rencor a nadie y asegura que "ya está olvidada" la queja que los jueces formularon hace varias semanas por defectos en el funcionamiento del IML. Se enteró de que se iba el 14 de diciembre y hasta el último día ha trabajado con la misma intensidad, participando activamente en la mudanza a la nueva sede del PTS.

-¿Cómo se va a encontrar su sucesor, Miguel Lorente, el instituto?

-Creo que es un instituto que ha crecido. Cumple sobradamente desde el punto de vista de los recursos humanos y la calidad profesional. He de decir que el equipo del IML no sólo son los médicos forenses; son todos y cada uno de los integrantes de una gran cadena que hace que funcione correctamente: desde los auxiliares de autopsia, hasta el personal funcionarial, de secretaría, de limpieza... Se me olvidará alguien, pero que quiero que quede eso claro. El IML es actualmente un instituto equilibrado y organizado para tiempo vista. No quiero hacer un derroche de vanidad por mi parte, pero esa previsión de trabajo garantiza que los imprevistos sean menores o, por lo menos, mejor solucionables. Como los médicos decimos, está estabilizado, y creo que a mi sucesor no le va a generar ningún problema.

-¿Tiene buena relación con él?

-Nos conocemos desde hace muchos años, desde que estaba yo formándome en el Departamento de Medicina Legal de Granada, y la verdad es que mi relación con el doctor Lorente en el ámbito personal es totalmente fluida y sin ningún dato que pueda contemplarse como negativo. Profesionalmente, es cierto que quizás discrepamos en algunos puntos de vista, pero creo que eso forma parte del crecimiento profesional por ambas partes. Creo que su propia trayectoria y proceder ya lo definen, por lo que yo poco más puedo añadir.

-¿Qué ideas deja en el tintero?

-Sinceramente, me han quedado por hacer muchas cosas, aunque he estado tomando decisiones hasta el último día. Una de mis pretensiones últimas ha sido la de generar un servicio forense que no existe en Granada, sí en Sevilla, que atienda los casos de psiquiatría y con ello se puedan agilizar más aún, y se evite una posible demora. También he querido ajustar aún más las normas de funcionamiento de acuerdo a la demanda social en materia de violencia de género. Además, había un proyecto que me apetecía muchísimo y que lo voy a ceder para que se haga: desarrollar una sala de exploración específica, tanto en su diseño e interiorismo, para cuando se atienden a menores.

-¿Qué balance hace de su gestión?

-Siempre he pensado que hacer una autocrítica positiva puede resultar pedante, pero también el exceso de humildad es un defecto, y creo que estoy en condiciones ahora de decir (siempre destacando que esto es una labor de equipo) que ha habido logros. Por ejemplo, contamos con el servicio de Laboratorio, que es pionero en Andalucía. Se consiguieron las guardias de 24 horas para el personal administrativo, funcionarial, y también las guardias para los médicos forenses. Se ha logrado el reconocimiento de los riesgos laborales en los auxiliares de autopsias, así como una organización de reparto equitativo de los asuntos que nos instan los juzgados. Además, ha habido una representación más activa de la Medicina Forense. Creo que nos hemos dado a conocer y hemos demostrado que somos un buen equipo. Para mí, el IML es como un tablero de ajedrez, en el que todas las piezas son necesarias para que el juego tenga un resultado, y todas están en el mismo plano.

-¿Se puede decir que ha acercado los forenses a la sociedad?

-Pues creo que sí. No es que en anteriores etapas no fuese así, pero las cosas se logran con persistencia. Estar ahí y allí cuando nos han requerido ha formado parte de mi trabajo, y la verdad es que las relaciones institucionales han sido enriquecedoras. Como no quiero que se me olvide nadie, voy a globalizar: estoy muy agradecida a todos los que conforman la Administración de Justicia, incluidos los sindicatos. Quiero hacer una referencia especial al TSJA y a la Fiscalía Superior, a la Policía Nacional y a la Guardia Civil. Por supuesto quiero resaltar mi relación con el Ayuntamiento, las instituciones sanitarias, la Facultad de Derecho, la de Medicina, la Coordinación de Trasplantes, las funerarias, la prensa...

-¿Y cómo han sido sus relaciones con sus superiores estos seis años?

-Vaya por delante mi máxima gratitud y admiración hacia Begoña Álvarez Civantos, la persona que desde un principio confió en mí. Ella sabe que le tengo un gran respeto personal y profesional. Sé que ha luchado mucho por el IML de Granada y gran parte de mi mérito está en ella. También quiero agradecer su trato y apoyo a la actual delegada y a los consejeros.

-Los jueces se quejaron recientemente ante el TSJA por defectos en el funcionamiento del IML. ¿Le molestaron sus críticas?

-La única molestia fue el no haber accedido previamente a una reivindicación continua que tenía para mantener reuniones con ellos. Voy a lanzar un órdago en su favor, y es que entiendo que en muchas ocasiones, cuando nos desborda el trabajo y no tenemos la suficiente cautela de analizar dónde nace el problema, a lo mejor nos equivocamos y lanzamos el problema al de enfrente. Creo que fue un acto poco evaluado. Después de la queja, hubo una reunión en Delegación, en la que desplegué todos los argumentos para poder contradecir. No estoy conforme con sus críticas y así lo he podido demostrar. Pero sinceramente, yo ya lo he olvidado.

-¿Esa queja está totalmente desligada de su cese?

-Totalmente. Para nada está relacionada. Yo he sido desplazada, lo que pasa es que al ser desplazada por la incorporación de una reserva de plaza, evidentemente tengo que cesar, porque si yo no firmo un cese estaríamos dos directores.

-¿Está preparada para volver al trabajo puro y duro de forense?

-Sí, en principio sí. Pero tenga en cuenta que yo no he dejado de ser forense en mi tiempo en la dirección. No he perdido entrenamiento. Vuelvo a Málaga y a todo el que vaya a verme le invitaré a 'pescaíto', pero eso sí, que vayan por partes.