Granada

Manuel Bastos Ansart, el mejor traumatólogo español del siglo XX

MÉDICO militar, doctor, profesor, médico de la Real Casa y de la Beneficencia General del Estado, Académico, vicepresidente del Ateneo de Madrid, prolífico escritor de artículos científicos y libros de su especialidad. Nació en Zaragoza el 22 de julio de 1887. Murió en Barcelona el 22 de enero de 1973. Fue un estudiante brillante, logrando el grado de Bachiller en 1900. Inició sus estudios universitarios en la Facultad de Medicina de Zaragoza, obteniendo la Licenciatura, con Premio Extraordinario, en 1907. En septiembre de ese año ingresa, por oposición, en la Academia Médico Militar. En 1908 es destinado, con el empleo de médico segundo, al Hospital Militar de Carabanchel.

En 1909 se traslada a Melilla participando en múltiples operaciones de guerra. Regresó a la Península en mayo de 1910. En 1911 fue ascendido al empleo de Médico primero, siendo destinado, como director, al Hospital Militar de Alhucemas. En 1912 pasó a prestar sus servicios en el Ministerio de la Guerra en Madrid, tiempo que aprovechó para presentar su tesis doctoral en la Facultad de Medicina, obteniendo el grado de doctor el 8 de octubre. En 1913 obtuvo, por oposición con el número uno, la plaza de Profesor auxiliar de Patología Quirúrgica de la Facultad de Medicina de Madrid, y en 1915, también por oposición, ganó la plaza de Médico de la Real Casa.

En 1918 se casó en Barcelona con su sobrina Consuelo Bastos y fruto de ese matrimonio serían sus cinco hijos: Carmen, Victoria, Elena, Manuel y Aurora. En 1919 participó en el Primer Congreso Nacional de Medicina celebrado en Madrid. En 1920 ingresa por oposición en el Cuerpo de Médicos de la Beneficencia. En 1921 realizó un viaje de estudios a Alemania. A finales de julio del citado año regresó de Berlín para incorporarse, como Jefe del Equipo Quirúrgico, en el Hospital Base instalado en Málaga para atender a los heridos de la Campaña de África.

En 1922 regresó a Madrid para continuar su labor sanitaria en la nueva Clínica Ortopédica y de Reeducación de Inválidos del Hospital Militar de Carabanchel. En abril de 1924, dada la gravedad de la situación en Marruecos, Bastos tuvo que emprender de nuevo la marcha a Melilla junto con los componentes de su equipo quirúrgico con el fin de atender a los heridos más graves que requerían operaciones inmediatas. En el mes de octubre es autorizado, por el Capitán General de la Primera Región, para asistir al II Congreso Nacional de Medicina que se celebrará en Sevilla. Desde finales de 1924 hasta 1925 se dedicó a mejorar la organización y asistencia a los heridos de guerra. Por aquellas fechas tenía reunidos suficientes datos sobre el curso consecutivo de los fracturados de guerra que había tratado a partir de 1921, y en un trabajo que se publicó entonces daba cuenta del método de cura por el apósito enyesado, aplicable no solo en fracturas simples, sino en las conminutas, además de complicadas con heridas, como solían ser las de guerra. Este método lo dio a conocer años después en un libro titulado Las Heridas por Arma de Fuego. Más adelante el Doctor Trueta lo llevó a Inglaterra, y se extendió por todo el mundo con el nombre de Método Español de Cura Oclusiva. La paternidad del citado método corresponde al Doctor Bastos, reconocida por todos los que han tratado este aspecto de la Cirugía de Guerra.

En las Navidades de 1926 termina un trabajo de divulgación sobre "Los mecanismos del movimiento en el hombre y los animales", que saldría a la luz al año siguiente.

Desde 1926 hasta el inicio de la Guerra Civil realiza las siguientes actividades: en 1928 es invitado por la Real Academia de Ciencias Médicas de Bélgica para dar unas conferencias; a finales de ese mismo año viaja a Praga para asistir al XXIII Congreso de la Sociedad Alemana de Cirugía Ortopédica; en 1930 publica un Tratado de Patología Quirúrgica General; en 1932 es nombrado director de la Clínica de Cirugía Ortopédica y Traumatología del Instituto Rubio; en 1931 prestó promesa de fidelidad a la República de España, en cumplimiento del Decreto de 22 de abril; en 1932 participa en el III Congreso de la Sociedad Internacional de Oncología celebrado en Madrid; en 1933 se desplaza a Londres para asistir al Congreso de la Sociedad Internacional de Cirugía Ortopédica y Traumatológica; en ese mismo año ingresa en el Club Rotario de Madrid, es nombrado vicepresidente de la Academia Médico-Quirúrgica Española y del Ateneo de Madrid; en 1934 viajó a Rusia para participar en el Congreso de la Liga Internacional de la Lucha contra el Reumatismo que se celebraría en Moscú; en el mes de julio de ese mismo año viaja a la República Argentina para asistir al II Congreso Nacional de Medicina; en el verano de 1935 se traslada a Egipto para asistir al XI Congreso de la Sociedad Internacional de Cirugía que se celebraría en El Cairo, y a finales de junio de 1936 pudo asistir al primer Congreso de la Sociedad Española de Cirugía Ortopédica y Traumatología que se celebró en Barcelona.

Con el inicio de la Guerra Civil Española, el Hospital Militar de Carabanchel, debido al avance del los sublevados, fue evacuado, pasando todo el personal junto con los heridos, más de mil, y todos sus enseres y material quirúrgico al Hotel Palace, que pasó a ser denominado Hospital Militar Quirúrgico. En agosto de 1937 Bastos recibió la orden de desplazarse a Alcoy (Alicante), para hacerse cargo del Servicio de Cirugía del Hospital Sueco-Noruego, que pasaría a denominarse Hospital Militar Base de Alcoy.

Terminada la Guerra Civil, en el mes de octubre de 1939 fue detenido por las tropas franquistas siendo sometido a un Consejo de Guerra en el que fue condenado, como autor de un delito de Auxilio a la rebelión, a 12 años y un día con pérdida de empleo. A finales de 1942 le concedieron la libertad provisional, teniendo que presentarse semanalmente a la comisaría de vigilancia asignada. No pudo volver a Madrid ya que su piso, su clínica, enseres y su finca de Majadahonda habían sido confiscados por la Junta de Requisa.

A partir de ese momento se traslada con su familia a Barcelona donde, después de colegiarse en 1943, comenzaría una nueva etapa de su vida profesional, ejerciendo la medicina privada que estaría dedicada a la Traumatología y la Ortopedia, y a continuar con sus investigaciones que se centrarían en la patología osteoarticular y en la reumatología. Una vez conocida su puesta en libertad su presencia fue reclamada por las principales universidades y sociedades médicas europeas y americanas, para asistir bien como invitado o conferenciante a los diferentes congresos o reuniones.

Falleció en Barcelona el 22 de enero de 1973, siendo enterrado, junto a su esposa, en la cripta de la Catedral de la Almudena de Madrid.

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