El colegio María Zambrano abre sus puertas en verano para atender a 300 niños de la Zona Norte

Las aulas del colegio María Zambrano no cierran durante el verano. Todo lo contrario, trescientos niños de entre 5 y 13 años pasarán por el centro durante julio y agosto para participar en la XX edición de la escuela de verano.

El alcalde, José Torres Hurtado, y el delegado el Gobierno, Jesús Huertas, fueron los encargados de dar ayer por inaugurado el nuevo curso, en una edición, que cuenta con la colaboración de Cruz Roja a través del Plan Piloto que están implantando en la Zona Norte. Los diez monitores que se encargan de atender a los menores realizarán con ellos actividades lúdico-culturales que potenciarán su creatividad, el desarrollo personal en grupo y la educación en valores: con conceptos como la idea de cooperación y responsabilidad compartida, igualdad de género y respeto al medio ambiente, entre otros.

Será de nuevo la Fundación Secretariado Gitano la que gestione una vez más el funcionamiento de un proyecto que tiene como fines evitar la deambulación callejera de los menores; contribuir a la conciliación de la vida personal, familiar y laboral; dinamizar el ocio y el tiempo libre de la población infantil; favorecer la integración social y facilitar herramientas para incrementar las habilidades sociales de comunicación y la conducta social de los niños.

Para lograr que esta escuela de verano sea una realidad todas las administraciones han arrimado el hombro y el Ayuntamiento destina 35.000 euros (para catering, materiales para los talleres y las visitas), la Junta, 40.000 euros para pagar a los monitores y 15.000 euros, más un monitor, llegados desde Cruz Roja.