Los alumnos de los estudios del área biosanitaria en la Universidad de Granada retomarán las prácticas en los centros sanitarios granadinos, que adoptarán todas las medidas de seguridad y precauciones frente al Covid-19 “que sean necesarias para reanudar la actividad docente y las prácticas de estudiantes, con la máxima seguridad posible para alumnado, profesionales sanitarios y pacientes”, según indica una nota de la Junta. Una de las primeras medidas tomadas en marzo, antes incluso del estado de alarma, fue la suspensión de las prácticas en hospitales y centros de salud. En la UGR hay 827 estudiantes matriculados en Enfermería más otros 1.677 en Medicina, según los datos de la última memoria académica. Los estudiantes de los últimos cursos de estas titulaciones desarrollan prácticas formativas en los centros sanitarios, al igual que los de otros grados (Odontología, Farmacia o Fisioterapia) y estudiantes de ciclos formativos.

Antes de retomar las prácticas, la Consejería de Salud y Familias ya ha remitido a los centros sanitarios el documento que recoge las instrucciones para la reanudación de la actividad docente presencial y prácticas en el Sistema Sanitario Público de Andalucía.

“Las medidas de seguridad previstas son rigurosas y de diversa naturaleza, ya que están referidas a los requisitos de salud de los participantes en la actividad docente y los medios para su comprobación; a las normas de obligado cumplimiento, y a aspectos organizativos, como el establecimiento de determinados circuitos o el uso seguro de espacios”.

Desde hace varios meses, la Consejería de Salud y Familias, en colaboración con la Consejería de Educación y Deportes, las universidades andaluzas y los propios centros sanitarios, han trabajado “de manera intensa y coordinada. El primer fin fue conseguir completar satisfactoriamente la formación práctica iniciada durante el pasado curso escolar, y que se vio afectada por el estado de alarma y las consiguientes medidas de confinamiento derivadas de la pandemia”, señala el comunicado.

“Se han tenido que realizar diversos ajustes y se han planificado minuciosamente aquellas actividades que requieren presencialidad”, detalla la Consejería.