Los granadinos hicieron caso y utilizaron transporte alternativo al vehículo particular para moverse por la ciudad y evitar así los problemas de tráfico ocasionados por las restricciones de las cumbres europeas que se celebran jueves y viernes en Granada. 

Eso se notó el jueves y este viernes en la ciudad y sus accesos. A pesar del caos y colapso que podía generarse a tenor de lo que se vive diariamente en el tráfico granadino, sorprendentemente las jornadas han sido tranquilas en cuanto al tráfico y es opinión generalizada que incluso ha estado mejor que cualquier día, con tráfico fluido y menos coches. 

Los datos indican que la planificación redujo un 12% el tráfico, aumentando el uso de autobuses y del Metro. 

Según los datos ofrecidos desde Fomento, el Metro de Granada registró este jueves, primer día de la Cumbre, 60.875 viajeros, lo que supone 10.000 más que un día habitual laborable. Todos los trenes funcionaron y no hubo incidencias destacables, salvo algún tren lleno a primera hora que no podía coger más viajeros y la invasión de la plataforma por la manifestación de la tarde en Villarejo. 

Ya el propio miércoles, primer día con restricciones aunque no había empezado aún la cumbre, se notó el incremento de usuarios y se registraron casi 56.000, unos 5.000 más de lo habitual. Y ayer jueves subió a casi 61.000.

Esta mañana de viernes el tráfico ha estado también controlado con una Circunvalación con circulación densa pero fluida y un centro con las mismas restricciones de circulación y aparcamiento, que estarán vigentes hasta las cinco de la tarde de este viernes, cuando se cierre ya el dispositivo por la finalización de la Cumbre.