Cada mañana se repite la misma historia. Decenas de autobuses cargados de alumnos acuden hasta el corazón del barrio del Realejo para descargar en los centros educativos del barrio. Los taxistas intentan llevar a los turistas a la Alhambra mientras los vecinos en sus vehículos recorren la calle Molinos camino de la Ronda Sur. Coches parados, malafollá generalizada y motoristas que deciden tomar las aceras a dos ruedas forman parte también de esta dislocada estampa. Un hecho que distintas asociaciones y colectivos vecinales han denunciado una y otra vez sin que hasta el momento se haya logrado una solución para el barrio. Ante esta situación, el área de Movilidad del Ayuntamiento de Granada ha iniciado un conjunto de reuniones para lograr la pacificación del tráfico de la zona.

Según explicó ayer la edil de Movilidad, Raquel Ruz en la comisión, en la primera reunión celebrada esta semana ya se presentaron varias propuestas. En el encuentro, algunos vecinos se mostraron partidarios de que los autobuses escolares no accedan hasta el interior del barrio y se coordine al alumnado para que acceda a los centros a pie. Por ejemplo, según relata la concejal de Vamos Granada, Marta Gutiérrez, una de esas medidas podría implicar que los autobuses descarguen en el Paseo del Salón y los niños realicen el recorrido hasta su colegio lo que también tendrá beneficios para su salud y socialización. La concejal que ha reivindicado en numerosas ocasiones medidas para pacificar el tráfico es partidaria de recuperar espacios para los ciudadanos.

Otra de las propuestas es que los autobuses descarguen a los niños en el Paseo del SalónEste sábado el barrio celebrará una gran fiesta con motivo de la semana de la movilidad

Desde el área de Movilidad, por otro lado, se está valorando registringir el tráfico en las franjas horarias más conflictivas para pacificar el tráfico o reducir el tamaño de los autobuses que acceden. Ruz explicó que mañana y pasado se celebrarán nuevas reuniones con los centros escolares para seguir avanzando en un proyecto capaz de mejorar el tráfico en esta zona tan conflictiva.

Esta propuesta ya se valoró años atrás para la Carrera del Darro. Esta calle, que soporta cada fin de semana picos de hasta 4.000 personas también tiene graves problemas de movilidad. En concreto, lo que se puso sobre la mesa fue llevar a cabo un proyecto de calle "inteligente" para abrir y cerrar el tráfico según las necesidades. Un paseo por esta zona evidencia que también es muy necesaria la paficación del tráfico. Por aquí, a las decenas de peatones, se suma la presencia de microbuses, taxis, vehículos de vecinos y de turistas con acceso al barrio gracias a su hospedaje. El caos, como ocurre en el Realejo entre semana con motivo de la actividad de los centros educativos y de la presencia de turistas y residentes motorizados es total.

De momento las prioridades del área pasan por buscar soluciones para el Realejo. Así, según detalló la edil de Movilidad, durante las jornadas de mañana y pasado se celebrarán nuevas reuniones, esta vez con miembros de los centros escolares para seguir analizando medidas. Una de ellas también podría ser incrementar los recorridos a pie mediante el programa Pedibus. En esta línea, la Concejalía de Movilidad, también esta barajando entregar chalecos reflectantes e identificativos a los niños que participan en estas rutas para que sean más seguras.

Mientras se encuentra una solución óptima para todos, la Policía Local de Granada mantiene activo un dispostivo diario de agentes durante las horas más conflictivas que son, fundamentalmente las que coinciden con el inicio y el fin de las clases; a primera hora con la entrada de los niños a clase y al mediodía. No obstante, fuentes de la Policía Local afirmaron ayer que existen numerosas dificultades de accesibilidad en este barrio fundamentalmente por la confluncia de tres centros educativos con una gran cantidad de alumnos en el histórico barrio.