El PP ha defendido el nuevo Instituto de Salud de Andalucía, en el que se integrarán la Escuela Andaluza de Salud Pública, con sede en Granada, y la Fundación Progreso y Salud, reforzará la investigación, permitiendo, ha dicho, una mayor autonomía presupuestaria.

Según la parlamentaria andaluza del PP Rosa Fuentes, la nueva estructura facilitará que se lleven a cabo actuaciones que antes no eran posibles y fortalecerá la gestión del conocimiento y formación.

Es un paso "crucial" para fortalecer el sistema sanitario público de Andalucía, según Fuentes, para quien el objetivo principal es dotar al sistema sanitario de una entidad capaz de abordar la investigación, el desarrollo y la innovación en salud pública de manera más eficiente y efectiva.

La decisión de constituir el instituto como una administración pública a través de la fundación tiene la intención de "garantizar la protección de derechos y bienes, y optimizar la gestión de los fondos públicos", dado que permitirá una financiación "más consistente y sostenible a largo plazo".

Con el proyecto de ley de creación del Instituto de Salud de Andalucía, la Junta pretende "romper una mala práctica y una atomización en materia de investigación y formación para ser un referente a partir de ahora nacional e internacional", ha incidido Fuentes, que ha instado al resto de fuerzas políticas a exponer sus argumentos pero desde una posición constructiva.

Fuentes ha querido invitar a las demás fuerzas políticas a que expongan sus argumentaciones, pero siempre desde una posición constructiva, evitando "manipulaciones".

Se ha referido expresamente al PSOE de Granada para recriminarle que "nunca dio la cara años atrás cuando se produjeron problemas laborales en la Escuela Andaluza de Salud Pública", y ha asegurado que la integración de ésta en el nuevo instituto no va a afectar a los trabajadores.