En el Ayuntamiento de Granada ha debatido hoy sobre la modificación del Reglamento Orgánico Municipal que ha propuesto el equipo de Gobierno para reducir plazos en la aprobación de un expediente fundamental como el de presupuestos.

El Grupo Municipal Socialista ha criticado que el PP haya iniciado los trámites para modificar el Reglamento Orgánico Municipal (ROM) con el único objetivo de reducir el tiempo en que se tramita el presupuesto municipal, “cortando así derechos de los grupos municipales de la oposición para ejercer su labor de control al gobierno”. El edil del PSOE Eduardo Castillo ha lamentado que “la primera vez en diez años que se modifica el ROM es para impedir que colectivos vecinales y grupos de la oposición puedan hacer su trabajo, en un ejemplo más de cómo utiliza el PP su mayoría absoluta de manera torticera para ocultar lo que no les interesa que sepan los ciudadanos”.

Castillo se ha referido al “cinismo del PP en el Ayuntamiento”, que se escuda “en agilizar trámites” para justificar “una decisión que va a traer opacidad a un gobierno que, de nuevo, está llenado la Plaza del Carmen de oscuridad y sombras”. El socialista ha ironizado con el hecho de que “Carazo diga que modifica el ROM para agilizar unos supuestos trámites ventajosos, cuando no ponen sobre la mesa ni una medida para acortar los tiempos y las listas de espera de la cita previa para trámites municipales, o dota de mayor personal el servicio de 010, el cual deja al mes más de un 30% de usuarios sin atención”.

Una solución intermedia

En comisión municipal de Presidencia se ha tratado este tema con la queja del PSOE de la limitación a la participación de la oposición y el concejal y portavoz municipal Jorge Saavedra ha asegurado que "el control está garantizado" porque se pasa de tres comisiones y dos plenos a dos comisiones y dos plenos. "Irnos a lo que marca la Ley nos permitiría reducir el procedimiento a Junta de Gobierno Local, comisión y pleno, sin plazo de enmiendas y solo 15 días de alegaciones. Pero nos pareció excesivo y buscamos una opción intermedia: aprobación inicial en Junta de Gobierno, pasar de diez días de enmiendas a seis; comisión delegada, primer pleno, 15 días para alegaciones, comisión y aprobación definitiva en pleno.

En la comisión, el edil socialista Juanjo Ibáñez ha dicho que no comparten esa tramitación respecto ala expediente más importante del año y que no puede reducirse la labor de oposición de los grupos, además de lamentar que se hayan eliminado las reuniones por áreas. 

El expediente de la modificación ha salido adelante con los votos a favor de PP y Vox y la abstención del PSOE. 

En la rueda de prensa posterior, Castillo ha dicho que "es inconcebible e injustificable el uso que el PP hace de su mayoría absoluta impidiendo la labor del control y fiscalización del expediente de Presupuestos, uno de los más complejos y amplios del Ayuntamiento. Ahora reducen a la mitad los plazos, entendemos que es porque no quieren que estudiemos el expediente con rigor y además quitan a los colectivos vecinales su capacidad de participación recogida hasta ahora en el reglamento”. “Está claro que al PP la transparencia le molesta, no quieren dar explicaciones, ni a oposición, ni a vecinos. Además de reducir los tiempos de tramitación, se ha cargado de un plumazo procedimientos arraigados en este Ayuntamiento como la convocatoria del Pleno del Consejo de Participación Vecinal donde hasta ahora se han dado las explicaciones oportunas a la ciudadanía sobre las cuentas municipales y la aprobación del presupuesto”, ha precisado Castillo, quien ha lamentado que “en menos de ocho meses, la señora Carazo haya traído de nuevo al Consistorio de nuevo la opacidad y el oscurantismo que tanto daño nos ha hecho en épocas anteriores”.