La última actualización del padrón municipal indica que la provincia de Granada suma ya un total de 921.987 personas, lo que supone un aumento muy leve respecto a 2021 (921.338), pero que supone el quinto año consecutivo de subida, pues en 2018 esta estadística del Instituto Nacional de Estadística reflejaba que en la región había 912.075 personas, lo que supone un incremento del 1,08%.

Con respecto a 2021, esta actualización del padrón vuelve a constatar una verdad ya conocida, que la capital está perdiendo población a pasos agigantados. De hecho, en solo un año la ciudad ha bajado un 1,35% de población, pasando de 231.775 a 228.682, lo que la convierte en el municipio que más población pierde dentro de los grandes núcleos urbanos de la provincia. 

El otro de los 'grandes' que sale perdiendo en la comparativa, aunque de forma mucho menor, es Santa Fe, que en 2021 contaba con 15.175 habitantes, mientras que ahora solo tiene 15.042, lo que supone una pérdida del 0,88% en un año.

De hecho, más allá de la capital, todos los núcleos urbanos que pierden población se encuentran por debajo del 1%. Así, por ejemplo, Cenes de la Vega, también en el Área Metropolitana, ha perdido tan solo un 0,7%, lo que se traduce en 60 habitantes, los mismos que Íllora, que pierde porcentualmente un 0,6% desde el último padrón. 

En el otro lado, en el que ganan población, el ranking lo encabeza Busquístar, con un crecimiento del 5,3% en tan solo un año. Sin embargo, más significativo ha sido el caso de municipios costeros como Almuñécar, que ha pasado de 25.890 a 26.748 habitantes, con un crecimiento del 3,21%. En este sentido, resulta curioso que la última actualización del censo (que modificaba los datos de 2011) reflejaba una tendencia a la baja, concretamente del 2,1%, lo que parece indicar una cierta mejoría, recuperándose así del 'batacazo' que sufrió en 2020, cuando registró 25.927 habitantes, frente a los 26.514 de un año antes. 

También sube, apenas un 0,5%, Motril, otro de los municipios costeros que salieron perdiendo en la última actualización del censo. Sin embargo, al ser cifras referentes a una década, los datos de esta estadística dejaban notar la sangría de habitantes tras la creación de Torrenueva Costa. De hecho, en el histórico del padrón se puede observar cómo en 20108, cuando la Junta de Andalucía dio luz verde a la creación de este municipio, Motril contaba con 60.592 personas empadronadas, mientras que solo un año después la caída llegó hasta los 58.020.

Juego de sillones

En la anterior actualización del censo, Alhendín era el gran ganador en población, un título que ahora no logra al conseguir 9.941 habitantes, con un crecimiento del 2,69% respecto a 2021, bastante lejos de otros como el ya mencionado Almuñécar. 

Sin embargo, el caso de Alhendín es significativo por otro motivo. Apenas 60 habitantes hubiesen bastando para que el municipio superase la barrera de los 10.001, lo que le permitiría pasar de los 13 concejales que cuenta actualmente a 17, lo que además permitiría beneficiarse de más ayudas al aumentar su masa poblacional. Este cambio es, lógicamente, fundamental de cara a las próximas elecciones, que tiene en cuenta el censo de 2018, cuando Alhendín tenía 9.168 personas (+7,78%). 

En una situación similar se encuentra Padul, que en la última actualización del padrón figura con 9.158 personas, un crecimiento del 8,3% respecto a 2018, pero también insuficiente para sumar cuatro nuevos concejales. 

También, aunque en otro orden, se encuentra Huétor de Santillán, un crecimiento en el último lustro del 2,13% no le ha valido para superar los 2.001 habitantes (1.923) que le hubiese permitido alcanzar once concejales frente a los nueve actuales. Una situación en la que también están Cortes de Baza (1.824) y Guadahortuna (1.836), quienes pese a todo se han alejado de ese salto, pues han perdido población en el último lustro. 

Peor parados salen otros municipios que, lejos de ganar, pierden concejales de cara a la próxima cita con las urnas. Es el caso de Agrón y Turón, que han bajado respecto a 2018 de los 251 habitantes (247 y 235 respectivamente), lo que lleva a quedarse con cinco representantes municipales cuando actualmente tienen siete. 

Casi como en un efecto dominó, su lugar lo ocuparán Ítrabo y Arenas del Rey, que en el último padrón bajan de los 1.001 habitantes (937 y 623), perdiendo así los nueve concejales de la actualidad y quedándose solo con siete. 

Pero, sin duda, la peor parada ha sido Pinos Puente, que vuelve a ser la localidad metropolitana con mayor pérdida poblacional. En 2018, este municipio tenía 10.144 personas empadronadas, lo que le daba 'derecho' a 17 concejales, pero en la última actualización de este indicador se reflejan 9.804 (-3,47%), lo que llevará a los pineros a tener 13 concejales tras las próximas municipales.