La farmacéutica madrileña Rovi tiene un gran vínculo de hace años con Granada, donde desarrolla parte de su acción y donde tiene en marcha su más ambicioso proyecto en forma de la fábrica de vacunas de Moderna para el Covid. Rovi, un gigante nacional se ha posicionado mejor en el mapa internacional con este salto empresarial desde su planta granadina tras la inversión en una nueva línea de producción con una capacidad de producción de más de 100 millones de dosis anuales. Un movimiento que tiene consecuencias económicas con la compañía mejorando sus ingresos notablemente en lo que va de año.

La empresa ha informado este jueves a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) que obtuvo un beneficio neto de 23,8 millones de euros entre enero y marzo, lo que representó un incremento total del 71% respecto al mismo periodo de 2020.

El resultado bruto de explotación o Ebitda creció un 74%, hasta los 34,8 millones de euros. Los ingresos operativos aumentaron un 29%, hasta los 130,5 millones de euros, impulsados por la fabricación para terceros, que creció un 179%, lo que incluye la colaboración con Moderna para el llenado y acabado de la vacuna contra el coronavirus.

La empresa destaca como uno de los hitos del trimestre la ampliación del acuerdo con Moderna para la fabricación del principio activo de la vacuna y la ampliación de la capacidad actual para el llenado y acabado, para lo que realizará inversiones en sus instalaciones de Madrid y Granada. 

De hecho, Rovi espera que sus ingresos crezcan entre un 20 y un 30% en 2021 gracias este acuerdo. Las ventas del trimestre mejoraron un 29% hasta los 130,5 millones de euros, impulsadas por la fabricación para terceros y por el negocio de especialidades farmacéuticas, sobre todo las heparinas.  

Asimismo, Rovi ha comunicado este jueves a la CNMV que propondrá a sus accionistas el reparto de un dividendo con cargo a los resultados de 2020 de 0,3812 euros por acción, lo que supone un incremento del 118% comparado con el dividendo pagado con cargo a 2019. 

Esta retribución implicaría el reparto de, aproximadamente, el 35% del beneficio neto consolidado de 2020 frente al 25 % del año anterior.