La Agencia Albaicín de Granada ha sacado a licitación, con un presupuesto de 99.388 euros, un proyecto de intervención en la Casa de Zafra cuyo objetivo es restaurar y rehabilitar todos los elementos artísticos que no han sido tratados en las actuaciones previas acometidas en esta vivienda nazarí, levantada en el siglo XIV en el barrio granadino del Albaicín.

La intervención se considera necesaria para garantizar una correcta tutela patrimonial de este inmueble declarado Bien de Interés General, así como para seguir asegurando su visita pública como ejemplo de la típica vivienda nobiliaria hispanomusulmana y nazarí: con patio rectangular y pórticos en los lados como paso previo a las salas principales con alcobas laterales.

Los trabajos incluirán la consolidación de yeserías y restauración de pinturas murales. También, la consolidación de la jácena, balaustrada y pies derechos de madera de la galería de la planta alta; así como la consolidación de la fábrica de ladrillo del ajimez de la sala de la planta alta, según se recoge en la memoria del proyecto, consultada por Europa Press.

Entre los años 2010 y 2012 se llevó a cabo la última gran intervención sobre el inmueble, que tuvo por objeto solucionar los graves problemas estructurales provocados por la humedad, así como la remodelación de algunos espacios para adaptarlo a su nuevo uso como sede de la Agencia Albaicín y Centro de Difusión del barrio del Albaicín. Junto a ello, se promovió la visita pública de este monumento, que hasta entonces no había tenido.

Ni en ese momento, ni antes, desde los trabajos de restauración de la Casa de Zafra allá por los años noventa, se abordó la restauración de sus elementos artísticos, como yeserías, pinturas murales, elementos de carpintería (jácenas, balaustradas, pies derechos), alfarjes, columnas, etc. Algo que ahora se quiere solventar con este contrato de obras que ha salido a licitación y para el que se ha fijado el 21 de junio como fecha tope para la presentación de ofertas.

La casa nazarí de Zafra está ubicada en el Albaicín, un barrio que hoy se hace extensible a todo el cerro de San Miguel, pero que en época musulmana, al menos hasta comienzos del siglo XIV, estaba dividido en distintos barrios y arrabales independientes. Fue levantada en el arrabal de la Recreación, del Deleite o de Axares, una zona de crecimiento generada durante el siglo XI a partir del núcleo más antiguo de la ciudad, la Alcazaba Qadima.

A pocos metros de la casa, estuvo anteriormente la muralla que enlazaba la fortaleza de la Alhambra con la Alcazaba Qadima, atravesando el río Darro a través de la Puerta de los Tableros, cerrando, en un momento inicial, la parte de la medina asentada en las zonas más bajas. En la parte correspondiente al interior de la medina se conservan aún construcciones medievales como el Baño del Nogal (conocido como el Bañuelo) y la casa nazarí de la calle del cobertizo de Santa Inés, según se ha expuesto en la memoria del proyecto.