La Delegación provincial de Salud y Familias trabaja en solucionar el caso de un docente que imparte clase en un centro educativo de Granada y que no quiere llevar mascarilla en el aula. Es el dato facilitado por Salud, que apunta a que se intenta solucionar el caso, que se ha dado en el inicio de este curso escolar. Como en el anterior año académico, el uso de mascarillas es obligatorio para profesores en todas las etapas educativas y para los alumnos a partir de primero de Primaria. Este único caso confirmado por la Delegación supone una excepción dentro de un colectivo formado por más de 12.000 trabajadores, de los que 7.034 maestros de colegio y 5.083 docentes en institutos en la provincia de Granada, según los datos aportados por la delegada de Educación y Deporte, Ana Berrocal, en los sucesivos inicios de las clases en las distintas etapas educativas.

Según la normativa que actualmente se aplica en los centros educativos de Granada, el uso de la mascarilla es obligatorio. El documento del Ministerio de Sanidad de Medidas de Prevención, Higiene y Promoción de la Salud para los centros educativos en el curso 2021/2022 establece que medidas como el uso adecuado de mascarilla “se han confirmado como esenciales para prevenir la transmisión en el entorno educativo”. Así, el empleo de esta protección facial se establece como un principio básico para la prevención de los contagios en colegios e institutos incluso si la distancia entre personas es superior al metro y medio.

En actividades al aire libre “controladas” y en las que se pueda mantener la distancia social “se podrá valorar no usar la mascarilla durante esa actividad” por parte de los alumnos y el profesor, aunque esa valoración debe tener en cuenta la “la situación epidemiológica”. Fuera de ese caso concreto, se establece que la mascarilla es obligatoria “en todo el profesorado”. Se establece sin embargo que en el caso del profesorado que “no pueda usar mascarilla por alguna de las exenciones”, se realizará una evaluación individualizada por parte de los Servicios de Prevención de Riesgos Laborales. Esas exenciones tienen que tener el aval médico, ya que únicamente se puede permitir que no se emplee en el caso de que las protecciones faciales estén contraindicadas por patología.

El caso de Granada se analiza para su gestión, tal y como recuerda la Delegación de Salud. Junto con Educación, conforman una comisión de seguimiento de las medidas puestas en marcha para evitar contagios.