San Antón y San Sebastián, ahora de interés turístico

Como cada año, el municipio granadino de Orce celebra en estos días sus tradicionales fiestas de San Antón y San Sebastián. Las de este año, que comenzaron ayer y terminan el domingo, cuentan con la particularidad de que son las primeras reconocidas como de interés turístico andaluz.

Esta declaración se produjo el pasado 4 de diciembre por parte del Consejo de Gobierno de la Junta de Andalucía tras la petición formal llevada a cabo por parte del Consistorio orceño en el año 2009.

Para que dicho requerimiento tuviera finalmente luz verde, las instituciones locales han tenido que acreditar la antigüedad de la fiesta, su arraigada tradición, que cuenta con una amplia participación por parte de la población y su singular valor cultural.

Además de todo lo anterior, el municipio, o su entorno, debe tener unos equipamientos turísticos de alojamiento y servicios, y realizar campañas de promoción y difusión de la festividad.

Manuel Morales, delegado de Turismo y Comercio de la Junta de Andalucía, quiso resaltar la importancia que, para Orce, supone el haber conseguido esta declaración. "Es un atractivo más para fomentar el turismo de interior de la provincia y permitir seguir aumentando los indicadores económicos del sector", apuntó.

Por otra parte, el alcalde de la localidad del norte de la provincia, José Ramón Martínez Olivares, destacó el hecho de que el reconocimiento se sume a otros atractivos que ya posee el pueblo, como la riqueza de sus yacimientos arqueológicos.

El edil también se refirió a la singularidad de la celebración, en la que una comitiva formada por soldados, danzantes, cascamorras y un paje traslada la imagen de San Antón desde la ermita, entre danzas y música, y lo devuelven cuarenta y ocho horas después.

A San Sebastián, los días 18 y 19, le recibe igualmente la comitiva, pero también los cristianos en la ida y los moros a la vuelta. Estos últimos se desempeñan entre bailes y ritmos musicales. Prácticamente todos los habitantes del pueblo participan ataviados con la ropa representativa del cortejo de bienvenida.

Entre estos dos traslados, se encuentra el día de la zorra, donde se produce el cambio de insignias y se cocina una gigantesca y deliciosa olla de migas para todos aquellos habitantes del pueblo, y foráneos, que quieran degustarlas.

El alcalde de Orce no quiso perder la ocasión de invitar a todo el mundo a que se acerque a la localidad de la comarca de Huéscar para disfrutar con el resto de vecinos del municipio de una fiesta que, desde este año, ofrece un reclamo más.