Rebelión de profesionales de la sanidad, un brote a nivel andaluz de listeria con fallecidos, niños con hipertricosis por medicamentos adulterados, destituciones de altos cargos por la presión, listas de espera y pacientes ya sin paciencia. Es la enumeración de un todo que se retroalimenta y crece de a poquito, una lista que a Salud le puede hacer pensar en esa canción que decía que “cuando me hablan del destino cambio de conversación”. Será el karma o el destino pero al gobierno del ‘cambio’ de la Junta en su primer año al frente lo están arrinconando los mismos problemas en materia de sanidad que a aquel PSOE con rasgos de anticristo.

Son los achaques de un SAS que apenas cumple 12 meses bajo nuevo signo político y al que pese a los esfuerzos por desmarcarse de los problemas ‘eternos’ de la sanidad andaluza, ha visto cómo sus fantasmas regresan.

Son, en primer lugar, las listas de espera que dijeron ‘aflorar’ en las primeras semanas de gobierno y para las que más tarde tuvieron el remedio del Plan de Choque. Una serie de medidas con un presupuesto de 25 millones de euros para toda Andalucía y que según los profesionales granadinos –los datos para comparar se publicarán próximamente– no ha servido para rebajarlas sino para incluso engrosarlas.

Las listas de espera –las de antes y las de ahora– son el reflejo de una problemática que los profesionales no han dejado de denunciar: la falta de personal para mantener una buena asistencia sanitaria que no pase por el desgaste de los propios profesionales.

El germen de esto fue la desfusión hospitalaria y todos sus daños colaterales pero lo que ha levantado a los sindicatos sanitarios de Granada han sido las promesas incumplidas de la consejería Jesús Aguirre. De hecho, todos los sindicatos estuvieron durante 10 meses en un extraño silencio a la espera de que cristalizaran las medidas anunciadas por Aguirre.

Con los profesionales engrasando las armas por toda Andalucía y con un fuerte polvorín en Granada, Salud comenzó a destituir altos cargos de la administración. El primero fue el gerente del SAS, Miguel Moreno Verdugo y apenas con dos semanas de diferencia llegó el cese del director del Virgen de las Nieves, el hospital de referencia de la ciudad y el que congrega las mayores manifestaciones de hartazgo de sus profesionales.

Pero Salud no solamente se ha tenido que enfrentar a las rebeliones internas, también ha tenido que lidiar con dos crisis sanitarias que tocaron a Granada: la de la listeria con foco en la carne mechada de Magrudis, que dejó cuatro infectados, uno de larga de duración en Granada y un reguero a lo largo del territorio andaluz. La segunda crisis en Granada llegó con los siete casos de hipertricosis –crecimiento excesivo del vello corporal– en niños a raíz del Omeprazol adulterado.

Por otro lado, el ámbito de la investigación sanitaria granadino se ha visto ‘tocado’ este año 2019 por la deuda de 18 millones que también ‘afloraron’ desde la Junta y ante la que anunciaron un remedio drástico: el rescate de las cuentas mediante un plan de intervención que ha acabado con la inyección por parte de la Junta al PTS de algo menos de 5 millones de euros.

Otro de los protagonistas de este 2019 ha sido el futuro del hospital antiguo Clínico. Tras pasar por distintos hipotéticos destinos, entre ellos ser la nueva Biblioteca de Andalucía, finalmente se ha anunciado que pasará a ser un hospital para pacientes crónicos.

El lavado de cara del SAS y los dos ceses fulminantes

Gobierno nuevo, vida nueva y todos los cargos directivos y políticos a estrenar con un banquillo repleto de ‘galácticos’ y la promesa de reflotar la sanidad andalucía como caballo de batalla. No hay sorpresa, cuando llegó el Partido Popular y Ciudadanos al Gobierno de la Junta de Andalucía todos los altos cargos de la sanidad andaluza cambiaron. Lo que es menos usual es que trascurridos los primeros 10 meses se produzcan ceses fulminantes en dos de los cargos más relevantes de la sanidad granadina. El primero fue el gerente del SAS, Miguel Moreno Verdugo que vio su posición precipitada tras 10 meses y con la avalancha andaluza de protestas de los profesionales sin un punto de retorno aparente. Moreno Verdugo contaba de entrada con una ‘leyenda negra’ ya que fue el ejecutor de los famosos recortes en la sanidad manchega por orden de Dolores de Cospedal. Pero la poda no quedó en ese cargo directivo andaluz, tras su cese llegaría el de uno netamente granadino y con una importancia robusta en la ciudad: la del gerente del Virgen de las Nieves, hospital que capitaliza las mayores protestas de los profesionales de Granada. El cese fulminante de José Guerrero lo llevó a cabo el consejero de Salud, Jesús Aguirre, justo el mismo día que negó en la capital que existiera una crisis sanitaria.

El brote ‘masivo’ de listeria y los niños con hipertricosis

El verano sanitario de este 2019 estuvo protagonizado por dos nombres propios: listeriosis e hipertricosis. Dos afecciones que llenaron titulares de toda Andalucía desde el mes de agosto hasta bien entrado septiembre. El caso de la listeria llegó a afectar a 204 personas y dejó tres muertos y siete abortos en toda la comunidad. En Granada, fueron cuatro los afectados, uno de ellos tuvo que estar en ingresado en el hospital San Cecilio del PTS una larga temporada. Este ramo de infecciones tuvo su raíz en la carne mechada producida por la empresa Magrudis. En cuanto a la hipertricosis (crecimiento excesivo del vello corporal) tuvo su incidencia solamente en niños y en Granada dejó siete afectados. El culpable fue un lote de omeprazoles defectuoso fabricados con un principio activo distribuido por la empresa Farma-Química Sur S.L., radicada en Málaga que llegó a distribuir el compuesto a 22 farmacias de Granada. El compuesto era el minoxidil, un principio activo para la alopecia.

El Virgen de las Nieves, el ojo del huracán

El hospital Virgen de las Nieves, referencia de la provincia de Granada, está canalizando todo el malestar de los profesionales sanitarios y que reverbera en otras provincias andaluzas en este 2019. La razón: el estado físico y mental de los trabajadores por el exceso de carga laboral. Esto es así, según ha denunciado en varias ocasiones la Junta de Personal del centro, porque Salud no cubre las bajas laborales ni las jubilaciones, que llegan cada año en mayor medida. Esta situación no solamente ha sido denunciada en las calles en las manifestaciones, también se ha elevado hasta la Inspección de Trabajo con una denuncia de más de 1.200 profesionales del hospital por la falta de contrataciones en todas las categorías, el exceso de jornada de los profesionales sanitarios o la no cobertura de vacantes. Por otro lado, al Virgen de las Nieves también le empaña el cristal una sombra judicial por, presuntamente, dispensar desde el año 2015 medicamentos sin pasar el control procedentes de una empresa distribuidora sin licencia que ha operado con el hospital hasta el mes de enero del años 2017.

Un plan de intervención de por una deuda de 18 millones

Rogelio Velasco, consejero de Economía llegó a Granada para anunciar una deuda de 18 millones de euros que el Parque Tecnológico de la Salud tiene contraída con empresas privadas así como con el Ministerio de Ciencia y Universidades. Esta deuda en realidad es histórica y para la cual se aplicó un primer rescate en 2017 de 8,4 millones de euros para sanear las cuentas de la entidad y asegurar la viabilidad de un recinto que alberga más de un centenar de empresas y entidades de los sectores biotecnológico, sanitario y farmacéutico. Esta segunda inyección es de 5 millones de euros y consta de la subvención nominativa de 4,4 millones de euros en transferencia de capital y otro medio millón de euros más en transferencia para funcionamiento. El anuncio del rescate tuvo la reacción de la presidenta de la Fundación PTS, Pilar Aranda que nada más conocerlo defendió las cuentas de este proyecto de innovación.

Las listas de espera en Granada, un estribillo eterno

25 millones de euros anunció la Consejería de Salud que se destinaría para reducir las listas de espera ‘alarmantes’ que econtraron en la sanidad cuando llegaron al Gobierno. Aún no se han publicado los datos de bajada tras la aplicación del plan de choque anunciado, ni tampoco se anunció qué montante correspondía a la reducción de las demoras de cada provincia. Las listas de espera son ese estribillo eterno de la canción de la sanidad andaluza y por ahora, lo que denuncian los profesionales es que esos números rojos están actualmente engordando y que en Granada, el plan de choque que anunciaron para reducirlas en horario extraordinario, no se cumple. Se trató de una medida que abriría los quirófanos en horario de tarde para que salieran las operaciones quirúrgicas atrasadas y que en algunos casos, se trataba de patologías graves.