Sólo la mitad de los destinos de esquí españoles están operativos esta Navidad
De los grandes destinos nacionales, sólo están disponibles la Sierra, Baqueira y Formigal La mayoría se encuentran en situación precaria
Más que blanca, la Navidad este año está siendo soleada, cálida y extremadamente seca. Seis días después de que comenzara oficialmente el invierno, los termómetros, el cielo y las cumbres de Sierra Nevada parecen empeñarse en que todavía no ha llegado el momento de que se instale la estación fría en Granada. Ni en Granada ni en el resto de España, porque si algo está caracterizando al final de este 2015 es la situación generalizada de falta de lluvias y, por tanto, de nieve.
La escasez de nieve no es un fenómeno que afecte solamente a Sierra Nevada, que al fin y al cabo y con un enorme esfuerzo por parte del equipo de Cetursa, consiguió abrir sus puertas el pasado 29 de noviembre. Sin que haya caído ni una gota desde antes de la apertura, la estación de esquí granadina logró el pasado viernes añadir nuevas pistas a la superficie esquiable y alcanzar los 3.000 metros de desnivel, un indicador muy importante para los amantes de los deportes de nieve. La falta de nieve afecta a prácticamente todas las estaciones de esquí españolas, con la excepción de algunas del Pirineo Catalán como Baqueira-Beret, que cuenta con 123 kilómetros disponibles de un total de 155 y que se vio muy beneficiada por el frente frío de noviembre que también sirvió a Sierra Nevada para abrir la temporada.
En la actualidad, según la información recopilada por el portal Infonieve.es, de las 31 estaciones de esquí españolas apenas han conseguido inaugurar la temporada 16, y muchas de ellas en condiciones precarias y con serios problemas de mantenimiento de la nieve. Además de Baqueira-Beret y Sierra Nevada (las dos mayores estaciones de esquí del territorio nacional y las de más capacidad de atracción junto a Formigal), esta Navidad han conseguido abrir parte de sus pistas y sus remontes las estaciones de Boí Täull (con 10 kilómetros de 45); Espot Esquí (18 de 30); La Molina (13 de 61); Masella (25 de 74,5); Port Ainé (17 de 27,9); Port del Comte (0,94 de 50 kilómetros); Tavascán; Vall de Nuria (5 de 7,61); Vallter 2000 (2 de 10,33); Valdelinare (6 de 14 kilómetros); Astún (21 de 50); Cerler (21 de 79); Formigal (37 de 137); y Panticosa (2 de 39 kilómetros).
Todas las estaciones del Sistema Central (La Pinilla, Puerta Navacerrada, Béjar y Valdesquí) continúan cerradas; al igual que las de la Cordillera Cantábrica (Alto Campo, Fuentes de Invierno, Leitariegos, Lunada, Manzaneda, San Isidro y Valgrande) y una de las más importantes del Pirineo Aragonés, Candanchú. Además, del listado de estaciones abiertas, ni una sola ha conseguido habilitar toda su superficie esquiable, lo que dice mucho de las condiciones meteorológicas de este invierno.
Los turistas de nieve, por tanto, tienen unas opciones muy reducidas debido a la falta de precipitaciones que afecta a todo el país. En el caso de Granada, Cetursa está poniendo toda la carne en el asador para conseguir inaugurar nuevos remontes el próximo lunes, así como sumar nuevas pistas a la superficie esquiable. Además, desde la apertura se están manteniendo precios reducidos de 25 euros por forfatit de adulto y ayer continuó la actividad de 12 horas Non-Stop de esquí con iluminación artificial para permitir al mayor número posible de esquiadores disfrutar de la poca, y ansiada, nieve de la estación.
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