El TSJA fija la vista para resolver los recursos del crimen de Charches

El Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) ha señalado para el próximo 19 de noviembre, a las 10:00 horas, la vista para resolver los recursos interpuestos en el caso del parricidio de Charches, según informaron a este diario fuentes judiciales. Por este crimen, María Dolores R. L., esposa de la víctima, Francisco Medina Espigares, fue condenada a 10 años de prisión.

Serán los magistrados de la Sala de lo Civil y lo Penal del alto tribunal andaluz, con sede en el Palacio de la Real Chancillería, los encargados de revisar el caso, al tratarse de un proceso que se tramitó por la Ley del Jurado y contó con un tribunal popular.

Tras conocer el fallo, tanto el abogado de la defensa, Jesús Huertas, como el de la acusación particular que ha ejercido la madre del fallecido, Pablo Luna, anunciaron que lo recurrirían. En el caso de la defensa, por entender que la extensión de la pena no había sido motivada suficientemente y que debía ser menor. En el de la acusación particular, por considerar que debió imponérsele un mayor castigo.

El juicio se desarrolló en la Audiencia de Granada a finales de junio. El jurado declaró culpable a María Dolores, que acabó con la vida de su marido de dos disparos de escopeta en la cabeza mientras dormía, tras enterarse de que le era infiel con una prostituta. La mujer, de 46 años, fue considerada autora de un delito de asesinato con la eximente incompleta de obcecación y la atenuante de confesión, así como con la agravante de parentesco.

El fallo estableció que María Dolores también cometió un delito de tenencia ilícita de armas por usar y disparar con una escopeta de caza para la que no tenía permiso, ilícito por el que se le impusieron otros seis meses más de encierro. El fallo acordó asimismo una medida de alejamiento para que la acusada no pueda acercarse a su suegra, Herminia E., ni a los hermanos del que fuera su marido, y fijó en 30.000 euros la indemnización que debía pagar a su suegra.

La resolución recurrida consideró probado que María Dolores sufre un trastorno de la personalidad por la dependencia que tenía de su marido, y reconoció que al tiempo de cometer los hechos "tenía afectada su capacidad de querer y entender de forma importante", tal y como confirmaron tres informes periciales distintos. En el juicio, María Dolores declaró que cuando mató a su esposo "no" era ella y que no fue un acto planeado.

El asesinato ocurrió la madrugada del 12 de mayo del año pasado, en la casa que el matrimonio tenía en Charches. La procesada ocultó lo que había hecho durante varios días y borró las huellas del crimen. El cadáver de Francisco fue hallado en la Rambla del Agua.