El próximo ejercicio económico de la Universidad de Granada paliará en parte los efectos de las políticas económicas de los últimos años sobre las plantillas de docentes, investigadores y personal de administración y servicios. La UGR ha aprobado un incremento de del 3,3% la partida de los costes de personal para la UGR para el próximo 2017, según el documento que ayer pasó por Consejo de Gobierno. Además, se refuerzan los planes propios de investigación y las ayudas en forma de becas. Con todo, el propio documento elaborado por la Gerencia de la Universidad advierte de la cautela con la que se han formulado las cuentas, a causa, fundamentalmente, de la incertidumbre generada por los diez meses de interinidad del Gobierno central, la negociación de un nuevo modelo de financiación de las universidades públicas andaluzas y, fundamentalmente, las sombras sobre el panorama económico. En total, los presupuestos crecen un 2,16% con respecto a 2016, hasta alcanzar los 390,9 millones de euros. El pasado ejercicio, la partida de gastos se redujo en un 4% hasta los 382 millones.

La preocupación por 'corregir' los efectos de las políticas restrictivas -fundamentalmente la tasa de reposición, que limitaba al 10% la cobertura de plazas vacantes- marcó parte del discurso de la rectora, Pilar Aranda, en el último Claustro de la UGR y ha tenido su reflejo en las cuentas previstas para el próximo ejercicio. Se harán las "incorporaciones que resulten necesarias" y se pone por escrito el compromiso de mantener el empleo, no sólo el próximo año, sino a medio plazo, y crear nuevos puestos, siempre que sea posible. Se expresa además la intención de aprovechar al "máximo" la tasa de reposición, tanto del personal docente como del de Administración y Servicios.

Al Plan Propio de Investigación se destinarán 3,5 millones de euros en 2017, lo que supone un aumento considerable con respecto a los 1,8 millones consignados para este 2016. También crece la partida del Plan Propio de Becas, desde los 1,5 millones hasta los 2,7 para el año próximo.

En cuanto a los ingresos, la financiación operativa alcanzará los 255 millones, mientras que por precios públicos se prevé la llegada de otros 52,3 millones de euros, un 5,6% menos que el pasado curso. Las transferencias corrientes crecen un 5,3% hasta alcanzar os 176,5 millones, y también se calcula el incremento de la partida de ingresos por patrimonio (67,4%, fundamentalmente por el alquiler de inmuebles). En cuanto a las transferencias de capital, se prevé que se queden prácticamente como están (0,29%), más de 158 millones. Por un lado, se prevé un aumento considerable gracias al nuevo modelo de financiación (más de 11%), pero se estima que se conseguirán menos fondos de proyectos de investigación nacionales e internacionales.

La base del documento viene reflejada en la memoria que precede a las cuentas. Allí se expresa claramente la "necesidad" de ser "prudentes y transparentes" tanto en los ingresos como en los gastos "con el objetivo de centrar nuestros esfuerzos en la viabilidad y sostenibilidad económico financiera de la Universidad, más aún tras el gran crecimiento que ésta ha sufrido en los últimos años materializada en inversiones en nuevos campus universitarios e inmuebles que ahora deben ser mantenidos y gestionados con personal".

Sobre el documento, desde CCOO se valora de forma positiva la inversión en Acción Social (2,5 millones) y se confía en que el esfuerzo realizado en los últimos años por parte del personal se vea reflejado con una apuesta clara. En este sentido, desde el sindicato se destacó el hecho de que en el primer trimestre del próximo año se abonará el 25% restante de la paga extra de 2012 que todavía se adeuda al personal de la UGR.

En cuanto a las infraestructuras, la inversión viene marcada por las estrecheces económicas. El esfuerzo se hará en el mantenimiento del patrimonio inmobiliario que ya tiene la Universidad. "Se acometerán reformas, adecuaciones y equipamientos donde fuera necesario y urgente, aunque dependerá de la efectiva percepción de subvenciones de capital para financiar las mismas", desglosa el documento. Al apartado de Infraestructuras y Equipamiento va destinada una partida de 7,4 millones. El pasado ejercicio se superaron los 14 millones.

Todo este encaje realizado entre ingresos, gastos, necesidades, priorizar políticas y determinar urgencias viene marcado por una premisa: cumplir con la obligación legal del déficit y endeudamiento 0, algo a lo que están obligadas todas las administraciones públicas.