La Sección Sindical de UGT en el Patronato de la Alhambra y el Generalife ha denunciado este lunes "que se va a proceder a despedir a doce personas pertenecientes a las categorías de peón especializado en los departamentos de jardinería y visita pública", una situación que, según recalcan, incide "muy negativamente en la preservación y conservación del monumento".

El pasado miércoles 5 de julio el Comité de Empresa, del que UGT forma parte, fue informado de que el cese de estos trabajadores se va a formalizar el día 9 argumentando que se producen a causa de "los procesos de estabilización de personal que la Junta de Andalucía viene desarrollando", según ha informado el sindicato en una nota.

UGT ha lamentado el "desprecio absoluto que, una vez más, la dirección de la Alhambra demuestra a su propio personal" por formalizar el preaviso de cese de actividad "fuera de plazo, sin tener en cuenta los 15 días de antelación tal y como viene recogido en el Estatuto de los Trabajadores".

Además de la "alteración continuada de la normativa por parte de los actuales gestores de la Alhambra", UGT denuncia "la falta de previsión" de la Junta de Andalucía a la hora de desarrollar los procesos de estabilización del personal laboral, ya que el número de plazas que se asigna a cada categoría en los concursos de acceso a fijo es menor que las necesarias para estabilizar a unos trabajadores con muchos años de antigüedad.

El caso del Patronato de la Alhambra es especialmente significativo a su juicio, ya que actualmente se dispone de suficientes vacantes libres sin cubrir para que no se lleve cabo ningún despido, sin olvidar que "se queda sin trabajar aquel personal de sustitución de vacaciones de verano que se vea afectado por los ceses del personal".

Por tanto, UGT considera que la justificación por parte del Servicio de Personal argumentando que "no se puede aumentar el presupuesto como consecuencia de la resolución de los distintos procesos de estabilización no es más que una idea descabellada de incidir una y otra vez en la destrucción de empleo público".

Junto a ello advierte de que durante los tres meses en los que sigue sin cubrirse la plaza del director del monumento "se está produciendo un deterioro en las condiciones de trabajo y la consecuente privatización del servicio público, poniendo en riesgo el adecuado sostenimiento del conjunto monumental".