La caldera de gasóleo que, desde el sótano del módulo central, calienta el edificio de Conservación y Restauración de la Facultad de Bellas Artes, tenía un "rendimiento bajo e ineficiente, a la par que contaminante". Además, no cubría "las necesidades demandadas por los distintos talleres, aulas, laboratorios y espacios" del inmueble. Los datos, extraídos de la ficha técnica de la actuación bautizada con el críptico nombre de 1F1-5, daban argumentos a la necesidad de una actuación, que en este caso ha estado sufragada por la Junta de Andalucía y la Universidad de Granada gracias al Programa de Impulso a la Rehabilitación de Edificios Públicos (Pirep), que se nutren de Fondos Europeos del Mecanismo de Recuperación y Resiliencia. Desde septiembre el edificio cuenta con una nueva instalación "eficiente" y que reduce además el consumo de energía y las emisiones.

La nueva instalación, que concluyeron a finales del pasado mes de septiembre, permite regular las condiciones de cada uno de los talleres, "consiguiendo que el espacio sea saludable y adecuado". Todo el sistema se gestiona desde una aplicación informática que permite el control remoto y la mejora de la eficiencia. Según la estimación de este aspecto, se ha conseguido una reducción de consumo de energía primaria no renovable de 83,86 kWh/m2 al año. Esto, indica el documento facilitado por la Oficina de Gestión de la Comunicación de la UGR, supone un gasto un 43,6% menor que el anterior.

La intervención en el inmueble ha supuesto un gasto de 1,2 millones de euros. De este total, la Junta ha puesto algo más de un millón, en concreto 1.041.726 euros. La Universidad, por su parte, ha invertido 218.762 euros. La consejera de Economía, Hacienda y Fondos Europeos, Carolina España, y la rectora de la UGR, Pilar Aranda, suscribieron el convenio por el que se financia la intervención. La granadina es la única universidad andaluza, junto con la Pablo de Olavide (UPO) de Sevilla, que ha contado con esta subvención del Pirep, programa financiado con fondos Next Generation EU.

La intervención ha consistido en la reforma de las instalaciones de calefacción, refrigeración y ventilación, además del sistema de control y gestión energética y aislamiento, en el edificio donde se imparten los estudios de Conservación y Restauración de Bellas Artes en Granada. Fue en diciembre de 2021 cuando las universidades granadina y sevillana presentaron los compromisos presupuestarios para llevar a cabo las propuestas, una en Bellas Artes y la otra en la Central Térmica de la UPO, que ha supuesto 3,7 millones de los que 2,9 han sido financiados gracias a este programa Pirep.

Según explicó la consejera de Economía, Carolina España, en la firma del convenio, se ha realizado el cálculo y diseño de la instalación térmica de los tres edificios que componen el centro de Conservación y Restauración. "Da soluciones a las necesidades específicas de control de temperatura y humedad demandadas por los diferentes talleres de restauración, así como otras estancias donde solamente se actúa sobre la temperatura", explica la Consejería en una nota, en la que especifica que a través del Pirep, la Junta interviene en 23 grandes edificios de titularidad pública, a los que se destinarán unos 100  millones. El objetivo es conseguir un ahorro energético de al menos el 30%, "lo que repercutirá en una importante reducción de gasto para presupuestos futuros", justifica la Consejería