Faltan apenas horas para que comience el tercer curso universitario en tiempos de pandemia y los centros se preparan para un escenario que se prevé cambiante. Por ahora, “donde los espacios y los medios lo permitan” el curso arrancará con “presencialidad total”, explicó la rectora en su discurso inaugural, celebrado esta mañana en el Crucero del Hospital Real. Esto será posible en las aulas donde se pueda guardar al menos 1,20 metros de distancia interpersonal o estén a un 50% de su aforo. Donde no sea posible cumplir con estas directrices será necesario establecer un modelo híbrido o semipresencial, que podría cambiar si las medidas se flexibilizan, tal y como reclama la UGR. Las clases serán semipresenciales y así lo han comunicado ya a sus estudiantes las escuelas de Arquitectura e Informática y las facultades de Ciencias, Ciencias de la Educación, Filosofía y Letras, Ciencias de la Salud, Ciencias Económicas y Empresariales, Derecho, Ciencias Políticas y Sociología, Comunicación Audiovisual (Información y Documentación sí será presencial al 100%), varios grupos de Nutrición Humana y Tecnología de los Alimentos que se imparten en Farmacia, Medicina, Psicología, Trabajo Social, Relaciones Laborales y Recursos Humanos o Traducción e Interpretación.

La decisión sobre cómo comenzar las clases el lunes se ha tomado esta misma semana, a tenor de las comunicaciones que los centros universitarios han publicado en sus páginas web. “Gracias a los equipos de gobierno de las centros, que han tenido que cambiar” los planes previstos “sobre todo en esta última semana”, indicó Pilar Aranda, que centró parte de su discurso inaugural en reclamar al Ministerio de Universidades que se flexibilice “urgentemente” el protocolo sanitario –aprobado el 16 de julio– a cuenta del descenso de los contagios y del avance de la vacunación. “Nuestra vocación ha sido y es seguir siendo una Universidad presencial”, expresó. “Por eso es tan necesaria y tan imprescindible la vuelta a la presencialidad”, mantuvo la rectora, que defendió que la UGR tienen “el deber y la responsabilidad” de ser un “espacio donde las personas se reúnan” y reclamó que la Universidad necesita que sus instalaciones “rebosen de experiencias de vida universitaria”. “Es necesario que el estudiantado [...]vuelva y se reencuentre, que conozca y viva la Universidad”.

La secretaria general, Asunción Torres, da lectura a la memoria de la UGR.

Para Aranda, el profesorado también necesita la presencialidad que por ahora no parece plenamente posible. “Para el PDI también es una emergencia”, clamó. Por su parte, el consejero de Transformación Económica, Industria, Conocimiento y Universidades, Rogelio Velasco, expresó que el objetivo es “alcanzar la plena presencialidad en el menor plazo posible”. “El curso, a diferencia del anterior, está marcado por la inmunización. La vuelta a las aulas será más segura por las vacunas”, expuso. También ofreció datos:el 82% de la población entre 18 y 24 años –horquilla en la que se puede situar buena parte de la comunidad estudiantil– ya ha recibido al menos una dosis de la vacuna contra el Covid. “Es cuestión de días que se llegue al 100%”, avanzó el consejero. Por cierto, a esa tarea de inmunizar se incorpora la UGR, que contará, según la rectora, con dos puntos de vacunación, en los campus de Cartuja y Centro. Además de insistir en la presencialidad, Velasco quiso dar la bienvenida a los “más de 16.800 estudiantes que se incorporan a la Universidad”.

Tras criticar el modelo de financiación, el discurso de la rectora abordó avances en proyectos como el Centro de Inteligencia Artificial puesto en marcha entre la UGR, Indra y Google, la creación del consorcio del IFMIF Dones o la iniciativa ligada con la Azucarera de San Isidro, donde se prevé un centro de innovación en sostenibilidad y medio ambiente ligado a los proyectos Life Watch y la iniciativa europea Green Deal. Arqus, el sello de unidad de excelencia María de Maeztu obtenido por el Instituto de Matemáticas (IMAG) o la puesta en marcha del máster dual de Transformación Digital de Empresas fueron otros de los hitos señalados por la rectora, que también recordó la colaboración con el Ayuntamiento de Granada, el Mando de Doctrina y Adiestramiento (Madoc), el Patronato de la Alhambra o la Diputación de Granada, entre otras instituciones.

Pedro Antonio García López, encargado de la lección inaugural.

Asimismo, Aranda recordó tanto a las víctimas del covid como a las de los atentados de las Torres Gemelas. “En este triste aniversario no quiero desaprovechar la ocasión para reivindicar la Universidad como espacio refractario a la barbarie”.

Velasco, por su parte, reconoció el “enorme esfuerzo” realizado para mitigar los efectos de la pandemia y la “satisfacción” por el hecho de que se han superado “con creces todos los obstáculos”.