A principios de 2018 Santiago Abascal ofreció un mitin en Granada con unos 600 asistentes. Apenas un año después, en plena campaña para las elecciones andaluzas, el presidente de Vox sacó músculo con la presencia de cerca de 2.000 personas al acto celebrado en un hotel de la capital. Y ayer fueron cerca de 1.000 personas las que arroparon al secretario general de la formación, Javier Ortega Smith, en la presentación de la lista de Vox Granada para el Congreso y el Senado para las elecciones generales del 28 de abril, unas listas que causaron un maremoto interno en la formación cuando Julio Vao, expresidente de la formación, ‘obvió’ las instrucciones de Madrid de poner en segundo lugar de la lista al Congreso Manuel Martín.

Esto, y la publicación de una sentencia por estafa contra Julio Vao abrió una crisis interna a la que se refirió Ortega Smith en su discurso ante la militancia: “Cuando hemos visto que no se ajustaban al perfil del candidato que buscábamos, y si por error habían aparecido en alguna candidatura o estaban al frente de nuestra organización interna en alguna provincia, han sido inmediatamente expedientados y apartados, explicó Ortega Smith, en referencia a la sustitución de Julio Vao en la presidencia de Vox en Granada por el parlamentario andaluz Francisco Ocaña, presente en el acto, aunque a nivel interno el partido está dirigido por una gestora en la que Martín, expresidente del PP de Salobreña, juega un papel fundamental.

Mientras tanto, según el número dos de Vox, otros partidos, con sus candidatos, no los sacan de las listas  “hasta que no salen en 800 escándalos y están sentados ya en el banquillo".

Vox, que tras la salida de Vao no cuenta con una sede en Granada ya que esta la aportaba el expresidente de la formación –al igual que su antecesor, Ignacio Nogueras–, se presentó ayer ante los militantes como la “única” candidatura que “va a mantener con firmeza la lucha contra la ideología de la imposición totalitaria de la izquierda” en materias como las políticas de género o la memoria histórica.

Con la “papeleta rojigualda de Vox”, la “España del futuro va a votar por su futuro”, señaló el dirigente de la formación, quien indicó, al hilo de las tendencias que marcan algunas de las últimas encuestas publicadas y otros datos de los que dispone, que, no solo en Madrid, sino en otras “muchas” provincias, su partido va a tener más votos que Cs, y en “varias” más que el PP.

En este sentido, “las encuestas no están contando toda la verdad”, ha afirmado Ortega Smith, para quien “algunos quieren seguir viviendo de las rentas, de quienes les votaron en el pasado”.

La Policía identifica a los jóvenes que irrumpieron en el acto.

El acto sirvió para presentar la lista al Congreso por la provincia de Granada, con ausencias como la del número cinco Jesús Cascón, que también estaba en la rampa de salida para las municipales en la capital y que ha decidido “inhibirse” de la campaña tras los últimos acontecimientos en la formación.

Tras Ortega Smith los focos se centraron en Macarena Olona, cabeza de lista a la Cámara Baja, que hace días comenzó la campaña en su cuenta de Twitter escribiendo frases castizas como “Granada.... mi cantar se vuelve gitano cuando es para ti”, publicitando un concierto de José Manuel Soto –”yo no me pierdo a este pedazo de artista y pedazo de patriota en Graná”– o colgando fotos de la Virgen de la Esperanza –cuya hermandad se ha posicionado contra el aborto en los últimos años colocando un lazo en uno de los varales del paso–.

Olona, abogada del Estado, adelantó que Vox hablará en campaña, “y mucho, de la corrupción” de “casa”, y enumeró , en este sentido, que, entre estos temas, estarán la gestión de la Alhambra o Cetursa, la empresa pública gestora de la estación de esquí de Sierra Nevada, o investigaciones judiciales como las de los casos Nazarí o Serrallo.