El ahorro energético alemán llega al geriátrico

Una empresa granadina diseña una residencia en Marchal que permitirá consumir un 75% menos de energía

El centro tendrá capacidad para 140 personas.
Efe / Granada

17 de agosto 2010 - 01:00

Una empresa granadina ha proyectado un geriátrico en Marchal conforme al estándar Passivhaus que, con origen en Alemania, permite construir un edificio con un consumo de energía un 75% más bajo del habitual, gracias a un mejor uso de energías renovables.

El proyecto, que cuenta con el apoyo de la Delegación de Economía, Innovación y Ciencia de la Junta de Andalucía en la provincia y con una inversión de nueve millones de euros, está diseñado para albergar a 140 personas, incluidos veinte usuarios de Unidad de Estancia Diurna.

La residencia se levantará en dos plantas en una parcela de 19.816 metros cuadrados de la localidad del Valle del Zalabí, con 16.731 metros cuadrados de zonas verdes.

El estándar de diseño pasivo Passivhaus, con arreglo al cual la empresa granadina Ecoholística construye edificios como este geriátrico, fue aplicado por primera vez en 1991 en Darmstadt (Alemania) y sigue siendo utilizado principalmente en el norte y el centro de Europa.

Mediante la aplicación de soluciones arquitectónicas para aprovechar mejor las fuentes de energía sin que se multipliquen los costes, se consigue un límite del gasto en calefacción y refrigeración, y confortabilidad térmica en las distintas estancias del edificio, construido conforme al estándar Passivhaus el cual está determinado por una serie de parámetros medibles.

Así, sólo en climatización, la residencia de ancianos del municipio del norte de la provincia conseguirá ahorrar un 90% de energía, para lo cual es necesario el respaldo técnico del Grupo Assyce, con ingenieros expertos en la integración de instalaciones de geotermia, biomasa, y captación solar térmica y fotovoltaica.

Consiguiendo de fuentes limpias la energía necesaria para su funcionamiento, el geriátrico tendrá una temperatura ambiente en su interior de 20 grados centígrados en invierno y de 26 grados en verano.

Mediante ventilación controlada 24 horas al día, se controlará la salubridad eliminando partículas en suspensión, monóxido de carbono, compuestos orgánicos volátiles y microorganismos en suspensión, sin que genere contaminación ni emisiones de dióxido de carbono.

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