Granada

La arquitectura conceptual de Kengo Kuma dará forma al Espacio Escénico

  • El japonés se proclama ganador del concurso con un proyecto que evoca la forma de una granada · El edificio, en aluminio, vidrio y hormigón, destaca por un graderío en forma de terrazas

No estaba entre las firmas más mediáticas pero consiguió la práctica unanimidad del jurado con una obra "conceptual" que "evoca la silueta orgánica" de una granada. El japonés Kengo Kuma, de renombre en otras ciudades europeas pero poco conocido en España, forma parte desde ayer de la historia de la arquitectura granadina como autor del proyecto del futuro Gran Espacio Escénico.

Granatum, nombre del trabajo presentado por el japonés en colaboración los arquitectos navarros Ángel Alonso del Val y Rufino Javier Hernández (AH Asociados), se proclamó ayer vencedor entre el selecto elenco de ocho finalistas, un G-8 entre los que también se encontraban la famosísima Zaha Hadid, primera mujer ganadora de un premio Pritker; Dominique Perrault, autor de la Biblioteca Nacional de Francia, o Navarro Baldeweg, responsable de los palacios de congresos de Salamanca y Cádiz. También competían Arata Isozaki, conocido entre el público español por su trabajo en el Caixa Forum de Barcelona, los finlandeses Ala Architectes y los prestigiosos arquitectos españoles Mariano Bayón y Francisco Mangado, este último asociado al único granadino que logró colarse en la final del concurso, Ramón Fernández-Alonso.

Las maquetas de todos, que hasta ayer eran un secreto celosamente guardado por la Consejería de Cultura, estarán expuestas en las próximas semanas en la Delegación del Gobierno de la Junta de Andalucía.

Sus propuestas y la reputación de la nómina de finalistas da una idea de la calidad de los proyectos presentados, de la que Emilio Herrera, portavoz del jurado y decano del Colegio de Arquitectos de Granada, destacó que se trataba de "acercamientos" muy distintos al solar del Espacio Escénico pero todos ellos "merecedores de ganar el concurso por unos u otros valores". Sin embargo, dijo que la deliberación no dio lugar a discrepancias porque la propuesta del japonés muestra una "gran sensibilidad" y había "conmocionado literalmente" a algunos de los miembros del jurado. Entusiasmo que se contagió también al resto.

Y el fervor con el proyecto de Kuma, Alonso y Hernández continuó contagiándose también a la consejera de Cultura, Rosa Torres, y al alcalde de Granada, José Torres Hurtado, que a la hora de sentarse a la mesa para su presentación coincidieron en destacar que era "un día grande" para la ciudad, para el mundo de la cultura y para la arquitectura.

Rosa Torres subrayó que el Gran Espacio Escénico proyectado por el equipo ganador reúne "calidad arquitectónica" con los últimos avances en equipamientos culturales, una "alta resolución acústica" y una "accesibilidad plena" para los espectadores con minusvalías.

La consejera de Cultura explicó que la propuesta elegida "evoca la forma de una granada por fuera, pero también por dentro, por la parte de las semillas". "Se organiza por medio de una infinidad de elementos de pequeña escala, que juntos crean una forma rotunda y de gran presencia", precisó Torres sobre la inspiración en las formas que provienen de la biología para el futuro edificio.

En este sentido, para relacionar los distintos espacios que lo componen, los arquitectos han optado por al forma de una malla hexagonal.

De esta forma, la sala de espectadores -con capacidad para 1.500 espectadores- tendrá "una amplia gama de terrazas abiertas al escenario", que "evitarán la relación jerárquica" pero formarán un único espacio "recogido y compacto". Un graderío del que Emilio Herrara precisó que "permitirá la relación de los espectadores con la escena pero también entre sí".

"El desnivel de acceso organiza la plaza en dos ámbitos -prosiguió Torres-, uno de los cuales será el espacio de exposiciones al aire libre, cubierto por ligeras pérgolas. Ligado a estas el edificio segrega un pabellón independiente, donde se ubica la administración y la venta de entradas".

En cuanto a los materiales que se emplearán, el Gran Espacio Escénico será de chapa de aluminio en las partes opacas. Y en las más abiertas, de aluminio y vidrio. El hormigón se utilizará en las partes voladas del edificio.

El alcalde de Granada se mostró ayer menos efusivo sobre la estética del proyecto, si bien subrayó que era "un edificio para la historia". Fue, sin embargo, más cauto que Rosa Torres ante las posibles reacciones de los ciudadanos. "Ya ha pasado la fase más complicada, en la que opinaba todo el mundo. Ahora, los responsables serán los que lo han seleccionado", se adelantó ante las posibles críticas del trabajo, que calificó como "rompedor". "Si luego queda guapo, o no queda guapo, depende del jurado".

El portavoz del jurado respondió al alcalde que puede estar "muy tranquilo" porque es un "magnífico edificio". Por contra, el alcalde sí se mostró muy satisfecho de haber logrado, junto con la consejera de Cultura, "sacar adelante" una iniciativa que había tenido que superar diversos escollos, como los problemas con la extensión del solar de la carretera de Armilla, que finalmente contará con una parcela de más de 6.000 metros cuadrados -el doble construidos-. "El proyecto completará una zona de la ciudad que cuenta también con el Parque de las Ciencias, el Museo de la Memoria y, ahora, un edificio para la música. Este espacio será un referente de actividades culturales en toda Andalucía", dijo el alcalde, quien precisó que se trata de un Espacio Escénico "para Granada y para todos los andaluces".

Emilio Herrera señaló que una de las cualidades que habían valorado era que la propuesta del japonés "en vez de imponerse con el lugar, se mimetizaba con el mismo", siendo éste un rincón tan "significado" para la ciudad, con grandes propuestas de arquitectura contemporánea, con la que no trata de establecer "competencias vanas".

Poco se precisó ayer sobre cuánto tardarán granadinos, andaluces o los turistas que acudan a la ciudad en ver edificado el "rompedor" proyecto, que cuenta con un presupuesto aproximado de 40 millones de euros. La consejera sólo dijo que los plazos "serán acumulativos" y que se intentarán agilizar al máximo, pero se mostró reacia a dar ninguna fecha de inicio o finalización de las obras.

No hay plazos, pero ya hay nombres y formas. Los granadinos tendrán que esperar para pasear por el espacio pero no para opinar sobre la idea. El principio de la obra ya está en marcha.

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