De base aérea a catedral efímera

La Base Aérea de Armilla es desde hace semanas un hervidero. A la actividad normal de adiestramiento y funcionamiento del recinto militar se ha sumado la frenética e intensa labor de preparar un recinto 'sagrado', una megaiglesia al aire libre, una zona capaz de acoger la celebración solemne de la beatificación de Fray Leopoldo de Alpandeire, para la que faltan sólo cuatro días.

Comprobar identificaciones en la puerta, analizar vehículos y conjugar las estrictas medidas de seguridad de un recinto militar con la acelerada organización del acto es la nueva labor que durante estos días realizan los militares de la base. Pero una vez salvados los trámites, y tras cruzar la zona de administración, talleres y hangares de servicios de seguridad, se llega a la zona de la beatificación. Una inmensa explanada de más de un millón de metros cuadrados que impresiona. Lo primero que se ve es la parte trasera del escenario, cubierta con lonas blancas. No obstante, el blanco será el color predominante y todo el escenario-altar estará forrado de un material especial de este color. Al fondo, casi imperceptible para la vista, cientos de miles de sillas que unas cerradas y otras ya colocadas, esperan a ser ocupadas por los fieles y devotos desde primera hora del domingo.

Ayer, con el gran día ya a la vuelta de la esquina, todo eran nervios y gestiones de última hora para que todo esté perfecto. "Esto es más grande de lo que parece. La cantidad de trabajo que tiene y toda la gente que está colaborando no se sabe", explica desde una esquina del escenario el coordinador de la beatificación, Mateo Torres.

No en vano, más de 4.000 personas están involucradas en la 'creación' del acto entre voluntarios, personal de la Base Aérea, de Protección Civil, Cruz Roja, Bomberos, cuerpos policiales, las distintas comisiones de organización, los capuchinos y, sin duda, los trabajadores encargados de levantar esta gran estructura.

El escenario tendrá dos niveles. En el superior irá la mesa del altar (la existente en la Iglesia de Santa María de la Alhambra), los celebrantes y en el centro la reliquia de Fray Leopoldo. En la zona baja irá el coro (en realidad tres coordinados para los cánticos de la celebración) y el resto de miembros de la Iglesia. En la parte baja también se situará la cantante Rosa López para interpretar el Ave María. Todo el escenario (con escalinatas centrales y jardineras a ambos lados) irá de color blanco.

Detrás, una gran carpa que hace los efectos de sacristía y que servirá para que se cambien los sacerdotes y se guarde todo el material necesario para la eucaristía.

Resalta una columna en la que se abrirá un gran retrato de Fray Leopoldo una vez sea declarado beato.

En la zona más cercana al escenario estarán los invitados y personal VIP. Se esperan autoridades civiles, militares y religiosas, entre ellas el ministro general de los capuchinos, el prefecto de la Congregación de los Santos y el cardenal Antonio Cañizares (en su día arzobispo de Granada), entre otros.

Las cifras de aforo van aumentando. A día de ayer tenían ya más de 80.000 acreditaciones y esperan llegar a las 100.000 ya que estos últimos días el personal está desbordado. "Pero hasta ese día no sabremos la gente que viene porque como la entrada también es libre, no podemos saber la gente que ha decidido venir sin acreditarse", matiza Torres. Ya hay 125.000 sillas colocadas y el resto se pondrán cerca por si es necesario ampliar el número. La gente que ha hecho el donativo es la que tendrá acceso a la zona de sillas. Las entradas libres se ubicarán al final y de pie. Aunque hay aparcamientos, zona para autobuses y transporte público, se recomienda estar allí a las 09:30 horas para poder empezar puntuales a las 10:00.

Para los peregrinos, la Base Aérea estará abierta desde las seis de la tarde del sábado.

El donativo además de sufragar el gasto de la organización (tiene un coste superior a los 2,5 millones de euros) irá a la obra social.

En los laterales del recinto se han situado ya los más de mil aseos portátiles contratados para dar atención a los asistentes. También se ultiman las carpas con el merchandising y el servicio de alimentación y bebidas. Se han realizado más de 500.000 estampas especiales para la beatificación que se venderán ese día. Las estampas es de lo más demandado entre los recuerdos de Fray Leopoldo. "Se llevan hechas ya más de 62 millones".

Aunque aún no está confirmado exactamente el momento, antes y después del acto se proyectará un vídeo con un documental realizado sobre la vida de Fray Leopoldo. Después porque a la hora de salir habrá que tener paciencia.