Granada es la segunda capital andaluza donde más caro es subirse al autobús y, además, es la ciudad donde más se ha encarecido el bono de transporte público, según un informe hecho público por la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) y que compara las tarifas de 53 ciudades españolas.

Según el estudio, en la capital granadina el precio de 50 viajes al mes en un autobús de la empresa Rober -concesionaria del servicio municipal- se ha incrementado desde 2010 un 19%, mientras que el Índice de Precios al Consumo (IPC) ha subido un 8,3%, lo que supone que en los últimos tres años el aumento del precio del transporte urbano ha sido de más del doble que la subida del coste de la vida. La segunda capital andaluza donde más se ha encarecido este servicio público es Sevilla, con un aumento del 15%, seguida por Málaga, con un 10%. En el otro extremo, destaca Huelva, donde los precios se han mantenido fijos. A nivel nacional, Albacete se lleva la medalla de oro a la ciudad donde más se ha incrementado el billete de autobús, con una estratosférica subida del 79% con respecto al precio de hace tres años.

En cuanto al precio, un granadino que se suba 50 veces al autobús al mes -el supuesto que OCU ha analizado en este estudio y que se ha realizado teniendo en cuenta los precios del pasado mes de febrero- debe desembolsar 36 euros, con lo que Granada es la segunda capital andaluza más cara, sólo por detrás de Málaga (40 euros), y por delante de Sevilla y Córdoba (34,5 euros), Cádiz y Jaén (31,5), Almería (31,2) y Huelva (26,5 euros).

A nivel nacional, Granada tampoco está mal posicionada, ya que es la decimocuarta ciudad más cara de las 53 ciudades estudiadas.

Lidera el ranking Madrid, donde 50 viajes en un mes salen por 54,6 euros y las tarifas del transporte público -aquí también se incluye el Metro- se han encarecido en tres años un 21%. Vigo (43 euros) y Huesca (42,5) completan el dudoso podio de ciudades españolas más gravosas para los usuarios de los autobuses urbanos. En el otro lado, las más baratas son Palencia, Soria y Zamora, donde 50 viajes cuestan 20, 19,4 y 17,5 euros, respectivamente.

En cuanto al coste del billete sencillo, la ciudad más cara es la capital catalana. En Barcelona subirse al bus urbano cuesta dos euros, seguida por San Sebastián (1,55) y Valencia (1,5). En cuanto a las ciudades más baratas, están Palencia (65 céntimos), Lugo (64 céntimos ) y Zamora (apenas 50 céntimos).

El informe de la organización de consumidores también destaca que en catorce ciudades se ofrecen descuentos para parados y familias con pocos recursos. En Andalucía han optado por esta medida Málaga y Sevilla.

Por otro lado, el documento de la OCU también destaca que en Granada el uso del transporte público por la noche resulta más caro que el uso del bonobús.

Por último, el estudio señala que se preguntó a los usuarios por la calidad del servicio. Según refleja, las quejas más comunes se refieren a la escasa frecuencia de paso del autobús. Asimismo, se critica la falta de puntualidad y el mal diseño de la ruta.