El bloque de Santa Ana incendiado a principios de mes comenzará su demolición este martes

Todo está listo para que el bloque del callejón de Santa Ana de Granada que ardió el pasado 2 de junio, poniendo en riesgo la integridad de la iglesia que le da nombre a la vía, pronto esté demolido y que las partes que quedaron dañadas por las llamas no supongan riesgo. Este lunes, los operarios que se van a encargar de las tareas de desescombro y demolición del inmueble han introducido en él la maquinaria necesaria, y será a partir de primera hora de este martes cuando comiencen los trabajos.

Estaba previsto que los movimientos comenzaran este mismo lunes, pero finalmente se han retrasado 24 horas. Los operaros han colocado la maquinaria pesada junto al edificio, en un movimiento que se ha realizado con cuidado debido al estado del inmueble, y han vuelto a cortar el Callejón de Santa Ana, que sigue cerrado al paso, para evitar accidentes tras el suceso.

El inmueble, de tres plantas y que data de 1900, sufrió un incendio provocado por una negligencia de unos okupas que se encontraban en la tercera planta, por causas que se han estado investigando. Las llamas se propagaron rápidamente y debido a estrechez de la calle y su cercanía a la Iglesia de Santa Ana, los bomberos tuvieron que trabajar a destajo para evitar males mayores.

La situación fue tal de riesgo que hubo que cambiar algunos elementos patrimoniales de sitio dentro de la iglesia para protegerlos ante un posible desprendimiento. En cualquier momento una chispa, una pavesa, o incluso una llamarada podían provocar que el fuego se extendiera al edificio de la iglesia, algo que finalmente sucedió, aunque de forma leve, afectando solo a la parte superior de la sacristía.

El primer aviso del fuego, que generó una columna de humo negro visible desde varios puntos de la ciudad, llegó sobre las 12:30 horas y diez minutos más tarde ya había efectivos del cuerpo de Bomberos de Granada actuando en las inmediaciones de la plaza de Santa Ana. Pasadas las 14:00 horas se produjo un desprendimiento en la fachada de la vivienda, razón que motivó el corte del callejón que se prolonga hasta hoy.

El inmueble, en su interior, está casi derruido por completo y apenas se mantiene en pie la primera planta. La fachada, o al menos parte de ella, si sigue en pie, pero con ese riesgo de derrumbe presente en muchos elementos. Es por ello que el Ayuntamiento de Granada ha obligado al propietario a demoler los elementos tanto de fachada como del interior del edificio que aún queden en pie. El jefe del Servicio de Conservación de Edificios del Consistorio, Ángel Toro, confirmaba a este periódico que "una vez que se hagan las medidas de seguridad de las actuaciones, los propietarios procederán a la rehabilitación del inmueble".

El número 6 de la calle Santa Ana es un edificio que, según el catastro, data del año 1900, catalogado de uso residencial que ocupa una parcela de 285 metros cuadrados, con 763 de suelo. A su lado, en el 4, otro edificio similar y también abandonado, tiene características similares.