Los bomberos refrescan la zona del incendio de Santa Ana: "No hay riesgo de propagación"

Un retén de Bomberos de Granada trabaja en la mañana de este martes en refrescar los rescoldos del edificio abandonado que ayer ardió, y que amenazó una de las joyas patrimoniales de Granada, la iglesia de Santa Ana. Con una manguera están arrojando agua sobre los escombros de la parte derruida del inmueble para rebajar la temperatura y que el fuego pudiera reavivarse, posibilidad que el jefe de los Bomberos de la ciudad, da prácticamente por descartada.

Gustavo Molino, responsable del Cuerpo en Grana,ada ha aclarado que todavía siguen trabajando en la zona donde se extendieron las llamas, llevando a cabo tareas para refrescar puntos de la vivienda que están todavía humeantes. Asimismo, ha aclarado que, en principio, "no hay más riesgo de propagación", y ha explicado que estas actuaciones están enfocadas mayormente a evitar las molestias provocadas por el humo.

Los peores momentos del incendio que paralizó ayer Granada parece que ya han acabado. Originado en una casa 'okupa' en las inmediaciones de la histórica iglesia de Santa Ana, llegó a poner en peligro el templo, al extenderse el fuego a la zona superior de la sacristía.

Asimismo, Molino ha explicado que a lo largo de esta mañana se llevará a cabo una visita técnica por personal de urbanismo, con el objetivo de valorar la zona y los daños provocados durante la mediodía y la tarde de ayer. A esto, ha añadido que no han tenido contacto con nadie por parte de la vivienda okupada, que se encontraba vacía ayer durante el incendio.

El edificio ha sufrido daños, llegando a desprenderse parte de la fachada y hundiendo parte de la cubierta, afectando a la estructura del mismo. Asimismo, se mantiene el riesgo de posible derrumbe.