Granada es la segunda de Andalucía que conserva más calles con nombres vinculadas al franquismo que vulneran la ley de memoria histórica, con un total de catorce por las quince que todavía perviven en el callejero de Málaga. Si bien es cierto que las provincias andaluzas son mucho más respetuosas con la legislación memorialista que las de otras comunidades autónomas donde se dan casos como el de Toledo, que tiene el récord con 123 calles y plazas con nomenclaturas relacionadas con Franco y Primo de Rivera, o Cáceres, que le sigue muy de cerca con 103, y Valladolid con 98. Estas cifras las ha ofrecido el Gobierno a partir de sus datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) a raíz de una pregunta de Compromís para eliminar estos nombres de los callejeros, sin embargo el Ejecutivo ha aducido respecto a las críticas a la vulneración de la ley de memoria histórica, que retirar el nombre de las calles es un asunto de competencia municipal.

Para ello está trabajando precisamente el Ayuntamiento de Granada, que ha creado recientemente una comisión técnica con el objetivo de eliminar de su callejero todo los nombres con connotaciones franquistas así como de la dictadura de Primo de Rivera. Esta mesa de trabajo en la que hay también representantes de la Junta, además de asociaciones memorialistas e historiadores de la UGR, pretende quitar todo tipo de simbología que vaya en contra de la ley de memoria histórica.

Entre las calles que se encuentran en el centro de la polémica están algunas como la conocida de Cardenal Parrado, cuyo nombre tiene origen en el arzobispo de Granada que fue consejero nacional y procurador en cortes durante la primera etapa del franquismo. Esta calle situada en el distrito Beiro está muy cercana a otras situadas en el barrio de Cercado de Cartuja como Pizarro Cenjor (subdirector de la Guardia Civil durante el franquismo y gobernador civil), García Morato (militar y aviador melillense que formó parte del bando nacional en la Guerra Civil), Álvaro Aparicio (responsable de la Obra Sindical del Hogar del franquismo) y Acosta Inglot (alcalde franquista en 1941).

El distrito del Zaidín, concretamente en sus barriadas de La Cruzada y Santa Adela se encuentran otras vías con connotaciones franquistas como la nombrada Kindelán, que hace referencia a un aviador del bando franquista u otras dedicadas a batallas de la Guerra Civil como es el caso de Jarama, Ebro, Pingarrón, Crucero Baleares o Belchite.