Los caracoles que fueron a la NASA

LOS CARACOLES

Hace más de 90 años desde que el restaurante Los Caracoles abriera sus puertas por primera vez. Vecinos del mirador de San Nicolás y situados en la plaza Aliatar, este lugar es fundamentalmente famoso, entre otras cosas, por sus platos de caracoles.

En la actualidad, Luis Martínez es el encargado de este restaurante que ha pasado de generación en generación. Así, los padres de los suegros de Martínez fueron los encargados de poner en el punto de mira a este lugar situado en pleno Albaicín.

La evolución del lugar ha sido patente con el paso de los años. Así, lo que empezó siendo una bodega de paso en la que paraban los arrieros, en la actualidad es un restaurante en el que se puede degustar una gran variedad de recetas y platos.

Sin embargo, si por algo es conocido este enclave es por sus caracoles. "Cuando este lugar era una bodega de paso sólo se ponían caracoles como tapa", explicó Martínez.

Así, esta tapa se ha convertido en una de las más viajeras de la provincia. "Nuestros caracoles han viajado diversos países como Japón o EE.UU. Sin embargo, lo más impresionante que nos ha pasado es llevarlos hasta la NASA", afirmó el dueño del lugar.

El viaje hasta la estación espacial se produjo cuando un químico de la NASA se presentó en el restaurante. "En la estación había varios españoles y les habían pedido al compañero que viniera a degustar esta tapa. Además, le pidieron que a su vuelta les llevase a ellos una ración hasta la estación", recordó Martínez.

Además de este plato, este cocinero también ha reinventado la comida tradicional. "A mí me gusta mucho innovar y presentar al público platos que son de mi propia creación".

Entre las recomendaciones de esta carta se encuentra el bacalao, las almejas, las gambas o el pulpo a la plancha. Además, Martínez recomienda su creación, los medallones de solomillo con almejas y gambas.

A pesar de las visitas internacionales es el público nacional el principal cliente de Los Caracoles. "Aquí vienen muchos clientes de Madrid, Valencia, Murcia, Málaga... sin embargo, fundamentalmente vivimos de la gente de Granada", recordó el dueño de este restaurante.

El gran tamaño de los platos también es otro de los referentes del lugar. "Aquí muchas familias vienen durante varios días para poder degustar mejor la variedad de la carta. Esto es porque hacemos los platos muy grandes", explicó una de las trabajadoras de este restaurante del Albaicín.

Aunque fundamentalmente Los Caracoles es un sitio en el que almorzar o cenar a la carta también hay lugar para las tapas.

"Las tapas que nosotros ofrecemos a nuestros clientes son selectas, por así decirlo", explicó Martínez. Así, la sandía con pimientos o el tartar de piña con confitura de pimientos son algunas de las singulares variedades que este establecimiento ofrece.

Durante la semana son cinco los empleados que trabajan a fondo para ofrecer lo mejor del lugar a los visitantes. Por ello, Martínez explicó que la filosofía de Los Caracoles es mostrar que "este es un lugar acogedor, sencillo y carismático. Un restaurante que ofrece a sus clientes una carta que no es la típica".

Mientras tanto de martes a domingo las puertas de Los Caracoles estarán abiertas para degustar la tapa más tradicional de este lugar del Albaicín.