El Juzgado de Instrucción 3 de Granada investiga por supuesto maltrato animal a un grupo de cazadores acusados de hacer cacerías furtivas en Sierra Nevada, según ha informado este viernes la Asociación Protectora de Animales Galgos del Sur, que se ha personado como acusación popular en esta causa.

Esta organización en contra de la caza ha indicado en un comunicado que la investigación se enmarca en la denominada operación Caprala, que llevó al Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil a la desarticulación de un grupo organizado dedicado a cazar de manera furtiva en el Parque Nacional de Sierra Nevada y en zonas de reserva de un coto de caza.

En la operación fueron investigadas diez personas de entre 22 y 61 años, nueve de ellos por un delito relativo a la protección de la flora, fauna silvestre y animales domésticos por cazar de manera furtiva armados y con una rehala de perros dentro del Parque Nacional de Sierra Nevada.

Tres de los investigados también lo han sido por un delito de tenencia ilícita de armas, por un delito contra la salud pública por cultivo ilegal de cannabis y por un delito leve de defraudación de fluido eléctrico, y otros dos por un delito de maltrato animal.

Investigación

Los agentes del Seprona, al inspeccionar en un cortijo, se encontraron a los 21 perros de la rehala "cruelmente maltratados en un estado físico y de salud lamentable", ha indicado la asociación.

A raíz de las investigaciones practicadas por el Seprona se detectaron indicios de comisión de varios delitos, entre ellos maltrato animal y ha sido en este último por lo que Galgos del Sur se ha personado como acusación popular.

Patricia Almansa, presidenta del colectivo, ha indicado que desgraciadamente este tipo de hechos sean "muy representativos" del mundo de la caza, con la utilización de perros "terriblemente maltratados" e infringiendo todo tipo de normas y leyes.