La sede del Colegio Público Rural (CPR) El Pinar en Ízbor no ha podido abrir sus puerta en el segundo día de curso escolar. Pese a inaugurar este mismo lunes las clases, el estremecedor incendio que desde hace prácticamente una semana asola la zona ha impedido que se pudiera retomar la rutina en las aulas.

Según explica el director del CPR El Pinar, Félix García, en Ízbor hay escolarizados siete menores. Seis de ellos han abandonado sus casas ante el avance del fuego y únicamente queda un menor en el núcleo de población, en una zona escarpada y a la que los docentes no han podido ir a causa del incendio forestal. Ya son unas 5.000 las hectáreas que han ardido y se trabaja sin descanso en la zona para controlar las llamas. El siniestro comenzó sobre las dos de la tarde del pasado jueves y lo errático de las rachas de viento, y su intensidad, han dificultado enormemente las tareas de control.

Ante esta situación excepcional, el centro ha optado por aprovechado la experiencia obtenida con el Covid -cuando se hizo necesario recurrir a la docencia online ante por el estado de alarma- y se ha contactado con las familias de los menores, a los que se les ha posibilitado la docencia telemática. Se trabaja de este modo en cubrir las necesidades del alumnado.

En la zona trabajan medios aéreos y terrestres. Las llamas obligaron a confinar los núcleos de Los Acebuche e Ízbor tras decretarse el nivel 1. Este martes se regresó al nivel 0 de alerta por el incendio forestal. El incendio ha llegado a tener un perímetro de 62 kilómetros.