21 cocineros cambian su experiencia por un título académico

Una veintena de cocineros de la provincia de Granada ha conseguido por primera vez hacerse con un documento oficial que constata su experiencia y la cualificación que tienen en su oficio sin haber realizado estudios medios o superiores. Son los primeros hosteleros que han obtenido el certificado de profesionalidad de Cocina y Repostería que expide la Consejería de Empleo de la Junta de Andalucía, una acreditación que reconoce las competencias de aquellos que, por diversas razones, se quedaron en su día fuera del sistema educativo, se incorporaron al mercado laboral y ahora necesitan un reconocimiento de sus conocimientos adquiridos con la experiencia.

"Ha estado muy bien organizado y con unos resultados excelentes", concluía a este diario el director del IES Hurtado de Mendoza, José Luis Lizancos. Este centro de Formación Profesional, ubicado en la capital granadina, ha sido uno de los más demandados en Andalucía para poner en marcha la experiencia piloto organizada conjuntamente por la Consejería de Educación, a través de la Dirección General de Formación Profesional, y Empleo.

En las pruebas libres de acceso a la FP que se convocan todos los años en España, se detectaba que había muchos profesionales de larga experiencia que no poseían ningún tipo de titulación. Sin embargo, la ley de la Cualificaciones y de la Formación Profesional, que data de 2002, ya expresaba la necesidad de crear un sistema nacional que evaluara y acreditara la cualificación profesional, independientemente de la forma como se hubiera adquirido. Así, en septiembre de 2009, la Junta de Andalucía lanzó el decreto (1224/2009, 17 de julio) de "reconocimiento de las competencias profesionales adquiridas por experiencia laboral", que se ha puesto en práctica este curso a modo de experiencia piloto. "El objetivo no es otro que elevar el nivel y la calidad de vida de las personas y su empleabilidad", añade Lizancos.

Medio millar de candidatos andaluces del mundo de la hostelería presentaron sus solicitudes en octubre y en julio 56 de ellos recogían las primeras acreditaciones.

"Más del 80% de los aspirantes ha superado todas las unidades de competencias (10 en total) y el 20% restante ha conseguido una media de ocho", informa Lizancos.

Para evaluar las competencias de los candidatos, varios asesores del instituto Hurtado de Mendoza mantuvieron diversos encuentros con cada uno de ellos.

Mediante una conversación profesional fueron averiguando el nivel de competencias que tenían los aspirantes y planificaron una serie de pruebas prácticas para calificarlos. "Me hacían muchísimas preguntas", explicaba la cocinera de una residencia de mayores de Alhama de Granada, Dolores Valderrama, que ha conseguido una de las acreditaciones. "Por ejemplo, a qué temperatura suelo congelar las verduras en la residencia -dijo- o qué plan de higiene realizo a lo largo del año". Valderrama asegura que les explicó cómo solía hacerlo y lo avaló con algunos documentos de trabajo. "Además les tuve que presentar todos los papeles de mis contratos y los cursos de cocina que había hecho", añade.

Todos los consultados por este diario se han mostrado muy satisfechos con el nuevo proceso de acreditación. Sin apenas tiempo para nada más que no sea trabajar o cumplir con las responsabilidades familiares, el nuevo sistema les permite obtener un certificado de su experiencia sin perder mucho tiempo. La mayoría ha conseguido acreditar todas las unidades de competencias convocadas. Aunque muchos se quejan de que les hubiera gustado haber podido acceder directamente a los módulos que les faltan para conseguir el título de técnico en Cocina y Gastronomía.

A casi todos les faltaba unas nociones básicas de Formación y Orientación Laboral (FOL) y de Proyecto Integrador para la acreditación, que deberán cursar en un futuro próximo. "Hemos escogido esta vía porque no tenemos tiempo para formarnos", explica Valderrama, que no cree que le sea tan fácil poder cursar módulos en un centro de Formación Profesional porque hay mucha demanda.

"El 60% de los candidatos de Granada ha solicitado matricularse en nuestro centro para completar la formación", dice Lizancos, lo que significa que se reincorporarán de alguna forma al sistema educativo.

Con estos resultados, la Junta de Andalucía ya ha dejado claro que el próximo curso continuará con el proceso.