Ya se habla de hacer excursiones. Será posible retomar el horario unificado de nueve a dos y muchos colegios dejarán de tomar la temperatura en la puerta del patio.La pandemia sigue, pero la normalidad –tal y como se entiende, la antigua– se abre camino en los centros educativos de la provincia. Más de 300 de segundo ciclo de Infantil, Primaria y Educación Especial reabren sus puertas para acoger a unos 80.000 estudiantes y comenzar el curso escolar 2021/2022, el tercero marcado por el Covid pero en el que la experiencia del pasado curso parece permitir un regreso progresivo y prudente a la rutina previa a aquel marzo de 2020. Habrá mascarillas, ventanas abiertas, grupos estancos y gel, pero, de forma progresiva, se prevé recuperar terreno perdido. Algunos centros ya han tenido reuniones presenciales con las familias y otros recuperan las actividades extraescolares que quedaron suspendidas hace un año y medio.

seguirá prácticamente igual, salvo lo de tomar la temperatura”, explica la directora del Ciudad de los Niños, Paqui Archilla. “El curso pasado funcionó muy bien” el protocolo para prevenir contagios, lo que permite al centro pensar ya en recuperar salidas al cine, al teatro o actividades lúdicas que “hacíamos” y tuvieron que suspenderse por la crisis sanitaria. “Este año la intención es recuperar” esa agenda, apunta Archilla, que también subraya que se mantienen las burbujas en el patio y en el comedor.

En el Conservatorio Profesional de Danza Reina Sofía –que comenzará el curso el día 15, como en los institutos– su directora, Paloma Fernández, señala que “en principio, vamos a mantener” las normas que se aplicaron el pasado curso. Hubo que subdividir cursos y acostumbrarse a las mascarillas. “Los alumnos tienen un meritazo impresionante”, alaba Fernández, que también añade que de cara a este inicio de curso sí hay cambios. Así, disminuyen las horas de limpieza asignadas. Si el pasado 2020/2021 tenían diez horas diarias, este año son cuatro. “Hemos pedido que se refuerce” la limpieza y desinfección, explica la directora, que ha dirigido su petición a la Delegación provincial.

Docente del García Lorca con los últimos detalles antes de comenzar el curso.

El CEIP Alcazaba de la capital tenía tres horas de refuerzo de limpieza el pasado curso y este año tendrán una y media, según se informó a las familias en la reunión previa al inicio del curso. La mitad. En el caso de los colegios, son los ayuntamientos los responsables del mantenimiento. En este centro se prevé recuperar las salidas y excursiones, las actividades extraescolares de tarde y se dejará de tomar la temperatura en el centro.Serán las familias las que tengan que poner el termómetro en casa a los escolares antes de ir a clase en virtud de un compromiso que deberán firmar. También unifican horarios de entrada y salida. La disposición de las mesas se ha modificado tras la relajación de la medida que imponía un metro y medio de distancia al 1,20, de tal manera que se podrá recuperar el trabajo en pequeños grupos. Sí se mantiene la necesidad de tener abiertas puertas y ventanas para garantizar la ventilación cruzada y evitar que los niveles de CO2 se disparen.El curso pasado las familias compraron los medidores que se seguirán utilizando en estos meses.

Dimas Martín, director del CEIP Federico García Lorca de Granada y responsable provincial de la Asociación Andaluza de Directores de Infantil, Primaria y Residencias Escolares (Asadipre), apunta a que el uso de los termómetros “no ha sido muy efectivos” en el aula, y es más recomendable que la toma de la temperatura se haga en casa. Sobre la limpieza, Martín indica que “no sabemos cómo va a ir”, aunque augura que se contratarán menos horas por parte del Ayuntamiento. “El año pasado ya se recortó”. Sobre las excursiones, admite que no tiene demasiado sentido restringirlas cuando la actividad turística se ha recuperado y se toman todas las medidas sanitarias.

Todo a punto en la Ciudad de los Niños.

Si la responsabilidad de la limpieza de los colegios recae en los consistorios, el de la gestión de los recursos humanos es cosa de la Junta. Aquí también hay cambios. María Socorro Ruiz, directora del CEIP Juan Ramón Jiménez de Granada, indica que este año su centro no cuenta con apoyo Covid. Tendrá un maestro menos que el curso pasado pese a tener los mismos alumnos “o más” y apunta al criterio de la Consejería para repartir estos docentes como posible explicación a este recorte. Con respecto a esta cuestión, desde el colectivo de directores de colegio representados por Asadipre se exigió a la Consejería “que se hagan públicos los criterios de asignación de los cupos de refuerzo Covid de la escuela pública, al igual que se han dado a conocer estos criterios para la enseñanza concertada”.

El inspector de Educación Juan Ruiz Lucena asevera que los cupos Covid se asignaron con los datos de escolarización de junio, por lo que hay centros que se han quedado sin ese recurso pese a tener un exceso de ratio con el proceso de matrícula de septiembre. En el primer llamamiento del Sistema de Provisión de Interinidades (Sipri), el pasado día 8, se ‘tiró’ de bolsa para incorporar a las aulas a 381 interinos en la provincia de Granada, de los que 112 son apoyos Covid. El pasado septiembre de 2020 se llamó a 434 funcionarios interinos en el primer llamamiento, de los que 141 fueron apoyos Covid, 29 más que ahora.

Sobre el inicio del curso, Ruiz Lucena destaca que los directores llegan con menos dudas después del rodaje del pasado año académico. “Ya tienen experiencia y han adquirido la rutina”. De las extraescolares, destaca que no todos los centros han decidido retomarlas cuando se desarrollan en interiores, pero que sí se ha recuperado este tipo de iniciativas en patios y zonas abiertas.

En el Juan Ramón Jiménez sigue vigente el grueso de las pautas del pasado curso. “Hemos mantenido la distancia” social, asevera su directora, aunque este curso se permite que la separación del alumnado pase del metro y medio al metro y veinte centímetros. En este colegio se pretende retomar las actividades extraescolares e incluso se ha tenido una primera reunión presencial con las familias, con todas las medidas sanitarias previstas.

En el Sierra Nevada desaparecen las entradas escalonadas de los grupos. Sí se accederá al centro desde tres puntos distintos, pero todos los grupos entrarán a las nueve y saldrán a las dos a partir del lunes –cuando comience de verdad el curso, ya que hoy los centros tienen una jornada de recepción que en la gran mayoría de los casos está limitada a un par de horas de primera toma de contacto–, con lo que se vuelve al horario anterior. Lo mismo ocurrirá en centros como el Colegio Público Rural El Pinar de Pinos del Valle, que, con 38 alumnos, prevé recuperar las actividades de senderismo que eran ya una “tradición” en el centro, explica su director, Félix García. Los escolares estarán divididos en grupos burbuja y no se mezclarán en los recreos, una decisión que en algunos centros se ha visto incluso beneficiosa ya que ha mejorado la convivencia y disminuido los conflictos.En todos los centros habrá mascarillas obligatorias a partir de los 6 años –en algunos colegios los pequeños también las llevan en las zonas comunes–, gel hidroalcohólico y separación de grupos.

Manuel Marchante, presidente provincial de Escuelas Católicas de Andalucía (ECA) y docente en el Cristo de la Yedra, apunta a que en su centro “las recomendaciones son intentar volver a la normalidad, como si el curso fuera normal, con salidas, excursiones...”. En este centro se prevé que los alumnos realicen actividades fuera, aunque todavía no se ha decidido nada en relación al viaje de estudios que tradicionalmente hacían los matriculados en el último curso. Sí se mantiene la necesidad de “prudencia. Seamos muy prudentes”, indica Marchante, que apunta a la necesidad de tomar “medidas consensuadas”.