El uso de conventos del Albaicín como posibles hoteles es una gestión que lleva estudiándose tiempo en Granada y que ha generado rechazo por parte de algunos grupos, vecinos y asociaciones.

Y el Ayuntamiento, que debate estas semanas entre autorizar los usos hoteleros o mantener el patrimonio, ha visto en las residencias de estudiantes una posible alternativa a estos espacios, que pasarían del rezo al estudio, de las monjas a los estudiantes.

Según ha confirmado el alcalde de Granada, Luis Salvador, a este periódico, hay conventos libres y otros que se pueden desalojar en este momento “y que puede ser que recaigan en el Ayuntamiento con un coste de mantenimiento muy grande porque son muy antiguos, con muchas necesidades, y o tienen un uso en un tiempo razonable o pueden tener muchos problemas en todos los sentidos”.

Por eso, el Ayuntamiento tiene que tomar decisiones rápidas sobre hacia dónde orientar su uso y establecer la normativa para ello, por lo que Salvador ha adelantado que ya ha hablado con la rectora de la Universidad de Granada, Pilar Aranda, sobre propuestas para hacer residencias de estudiantes.

“Me transmitió en fechas recientes que la demanda para la realización de residencias es muy importante también en toda la ciudad y por tanto hay que ver el tema de alojamientos turísticos, hay que ver el tema de residencia y hay que ver también el efecto que están causando los pisos turísticos”, dijo el alcalde.

Ya en la última comisión municipal de Urbanismo, el servicio aseguró que se estaba trabajando con la Junta de Andalucía respecto al cambio de uso de hoteles y el interés de un grupo chino en hacer hoteles. Se trabaja en la innovación del Pepri Albaicín (el Plan Albaicín) para esos equipamientos, pero no para cambiarlos al residencial singular para uso hotelero sino para mantener el equipamiento, lo que permitiría hacer las residencias de estudiantes. El expediente todavía no tiene la aprobación provisional.

Lo que sí fue rechazada fue la innovación puntual al cambio de uso del convento de San Bernardo al haber una innnovación superior que afecta hasta a seis conventos.

El proyecto del grupo chino incluía una parte como uso residencial singular y otra como equipamiento cultural privado, por lo que la negociación estaría en limitar y definir hasta dónde se puede llegar con esos usos de residencial singular o cultural.

Podemos-IU ha pedido al Ayuntamiento que decline la opción de cambiar a uso hotelero estos espacios y que por responsabilidad exija a la Junta que ejerza el “derecho de tanteo y retracto” y puedan convertirse en equipamientos públicos para el barrio y la ciudad. En concreto, para el de las Bernardas propone el grupo convertirlo en la ampliación del Museo Arqueológico de cara a la Capitalidad de 2031.