"La crisis hace más necesaria la unión del tejido empresarial"

La Cámara de Comercio de Motril, la única que existe en la provincia junto a la de la capital (que fue fundada en 1886), cumple cien años. La corporación de Derecho Público está de celebración, aunque le toque vivir circunstancias adversas, como a todas, por la decisión adoptada por el Gobierno de adscripción voluntaria de las empresas tomada en el marco de actual crisis económica. Sin embargo, su presidente, Ángel Gijón, se muestra optimista de cara al futuro de una de las instituciones más antiguas de toda la provincia de Granada.

-¿Cómo ve el futuro de las Cámaras?

-Desde la aparición de la Ley de diciembre de 2010 con la adscripción voluntaria a la Cámara, que nos obliga a todos, aunque seguimos siendo corporación de Derecho Público, colaborando y asesorando a administraciones, tenderemos a posicionarnos en el mercado como una corporación o institución, aunque en la realidad nos parezcamos más a una asociación, eso sí, muy dinámica, de manera que sean utilizadas por la ciudad, tanto por los autónomos como por los empresarios, no sólo para defender los intereses de los empresarios, sino para unir sinergias y dar un servicio que ayude al tejido productivo a ser más competitivo.

-Y mirando al pasando ¿qué merece destacar en su larga historia?

-La Cámara de Comercio de Motril siempre ha sido muy activa en las distintas épocas. Fue un activo fuerte en los años en los que la industria era un vector fundamental en la economía local. También en la historia más reciente, en la década de los 80, tuvo un papel fundamental para la implantación del Banco Hipotecario en Motril y durante los años de la floreciente industria azucarera fue un importante bastión.

-¿Qué les puede decir a los que piensan que se trata de una institución desfasada?

-Lo primero que se me viene a la cabeza es que en Madrid, por ejemplo, Ifema, que están en manos de la Cámara, nadie se hace esa pregunta. En segundo lugar, ya circunscribiéndonos a nuestra ciudad, tengo que recordar que la Cámara de Motril ha estado colaborando en los últimos meses en presionar a las distintas administraciones para resolver el tema de la financiación de las autovías, de las conducciones de la presa de Rules, o en las inundaciones y que es miembro del Consejo de Administración de la Autoridad Portuaria o de Ferrmed, lobby que impulsa el corredor ferroviario del Mediterráneo.

-¿Qué ofrece esta corporación a la sociedad motrileña?

-Aparte de lo anteriormente dicho, la Cámara sigue en la labor de impartir cursos de formación para empresarios y trabajando en temas como las nuevas tecnologías, los idiomas o la seguridad en el trabajo.

-El escenario, sin duda, ha cambiado desde que se fundó la Cámara hace ahora un siglo a los tiempos actuales...

-Algo no ha variado y es que los seres humanos siempre han tenido la necesidad de agruparse para defender sus intereses y en el terreno económico siempre ha habido organizaciones que han tratado de cubrir esa necesidad. Los intereses públicos se han defendido desde hace mucho tiempo, por una parte por las administraciones y, por otra, por corporaciones de derecho público, tales como Cámaras de Comercio o Colegios Profesionales. El momento actual de crisis hace más necesaria que nunca la unión del tejido empresarial.