El cuerpo de un delfín permanece todo el día varado en la playa de Las Azucenas
Los ecologistas sospechan que un arrastrero podría haberlo traído en sus redes hasta la costa
Alrededor de las nueve de la mañana de ayer, un hombre que estaba paseando por la motrileña playa de Las Azucenas de Motril se encontró el cadáver de un mamífero marino varado en la arena, que permaneció durante todo el día en el mismo lugar hasta que hoy los técnicos del Centro de Recuperación de Especies (CREMA) retiren el cuerpo.
Según un portavoz del grupo ecologista Alborán, a falta de que los expertos lo clasificaran, se podía apreciar que se trataba de un calderón común (globicephala melas) de casi cuatro metros, adulto, hembra, muerto durante las horas previas, sin que se le detectasen heridas ni huellas, salvo las propias de arrastre por las olas.
Este voluntario comentó que observó en el animal sin vida algunos parásitos, en concreto, en la aleta caudal, "pérdida de los ojos" y parecía que disponía de "grasa y músculo suficiente", por lo que se deducía que había comido bien en los últimos días. Está previsto que en la mañana de hoy llegue un grupo de biólogos del Centro de Recuperación de Especies Marinas de Alcegiras para que proceda a realizarle la necrosis correspondiente. Hasta entonces, su muerte es una incógnita.
Según el portavoz del colectivo ecologista, se sospecha que un arrastrero lo haya traído en sus redes hasta la costa, mientras que el moderado viento de levante que soplaba en esos momentos introdujo al animal aún más en la arena. En la Costa Tropical existe una colonia de delfines, cuyos miembros algunas veces se han desorientado también por el ruido de embarcaciones que existe en el mar.
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