Los que no tengan hijos podrán hacerse una idea de la evolución de las celebraciones de cumpleaños observando sus propias felicitaciones: 200 en su muro; 20 por privado; 20 por Twitter; 30 WhatsApp; y 10 llamadas. Atrás quedaron los años de mensajes de los familiares cercanos y los compañeros con buena memoria. Ahora, vía y gracias a las redes sociales, uno recibe emoji de otra punta del mundo de antiguos correligionarios de fiestas que hace dos décadas que no ve. Mutatis mutandi, lo mismo ha ocurrido con los cumpleaños infantiles.

El adiós a los Risketos, las medias noches con jamón de york y los dos kilo de Sugus para repartir entre una clase de 40 alumnos ha dado paso a los cumpleaños temáticos, en centros de ocio, con animadores profesionales y con regalos pagados por Bizum.

En paralelo a la complicación del asunto ha surgido también la profesionalización del mismo. Como las fiestas ya no se celebran en casa con diez o doce amigos hace falta alquilar centros de ocio. Esta definición engloba tanto a aquellos locales que se alquilan para la fiesta y los padres ponen el resto como los que ofrecen todo el lote, con menús, animación, actividades...

En Granada han proliferado estos establecimientos, tanto en el centro como en los pueblos del cinturón metropolitano. Algunos, como el Balcón del Genil o El Guerra, ambos en Huétor Vega, ampliaron su oferta gastronómica con enormes parques infantiles para satisfacer la demanda. Por ejemplo, Zutelandia, las instalaciones tanto interiores como exteriores de El Guerra, permiten disfrutar de gymkanas, piscinas de bolas, música, animaciones…

Ese es el  paquete más o menos básico de actividades que ofrecen otros sitios creados ex profeso para las celebraciones infantiles. Por ejemplo, Zona Baboo, en La Zubia, permite organizar cumpleaños “de la mano de profesionales y despreocúpate de toda la organización”: “Juega con tu hijo o contrata los servicios de nuestros monitores profesionales y con experiencia en el mejor trato para estos pequeños reyes”.

Es cierto que los padres tienen que rascarse más el bolsillo pero, además de ahorrarse trabajo con los preparativos, ganan en tranquilidad al contar con zonas adaptadas especialmente para la seguridad de los más pequeños.

Además de ganar en comodidad, se gana en tranquilidad al contar con zonas adaptadas para la seguridad de los más pequeños

En una línea similar a Baboo pueden encontrar El Pequeño Reino de Mundo Aventura, en Pulianas; Lluvia de Estrellas, en las Gabias; El Castillo Mágico, en la zona de Arabial; Mundo Aventura, en el Polígono Industrial de Zárate, en Peligros; Buddy Park, cerca del Hospital la Inmaculada; Fun Park Serrallo Plaza, en el centro comercial del mismo nombre... Incluso gimnasios como We organizan cumpleaños infantiles en su zona de ludoteca y cafetería.

Para los padres que aún no conozcan la dinámica y esté preguntándose el montante al que puede ascender la broma del cumpleaños, el precio en la mayoría de los casos depende del número de comensales: casi todos oscilan entre ocho o nueve euros por pequeño y los diez.

Por ejemplo, en el Pequeño Reino de Mundo Aventura, el menú que incluye zumo, refresco o batido, snacks variados, bizcocho, napolitana de chocolate, tarta de cumpleaños (a elegir), bolsa de chuches, regalo sorpresa para el anfitrión, tarjetas de y invitación y 2 horas de parque sale sólo a ocho euros por cabeza.

En otros casos hay una tarifa mínima. En el Castillo Mágico se  contrata un servicio mínimo de 169 euros para diez niños si se celebra de lunes a jueves. Y 179 los fines de semana. Y entre 9 y 13 euros por niño ‘extra’ en función del número de invitados y del día de la semana que se escoja para el ágape.

Y en cuanto a las fiestas temáticas, este último, por ejemplo, cuenta con cinco espectáculos diferentes para celebrar cumpleaños: “Podrán vivir una preciosa y delicada historia con Elsa y Anna de Frozen; compartir la alegría y vitalidad de Rapunzel; convertirse en heroína como Ladybug; vivir una historia Pirata o con Superhéroes si así lo sueñan”, explican sobre la organización del evento.

Por suerte para los padres, las políticas educativas actuales han reducido la ratio de alumnos por aula a poco más de la veintena, lo que abarata los gatos porque, para no herir sensibilidades, sobre todo entre los pequeños, no es raro hacer invitaciones extensivas a todos los compañeros de clase.

Y eso en cuanto a los organizadores pero, ¿como corresponder a los anfitriones que preparan semejantes festivales infantiles? Porque las invitaciones masivas son un arma de doble filo para los progenitores, que pueden tener que hacer frente a una media de entre  15 y 20 eventos infantiles por curso.

En eso también se ha impuesto la vía más práctica, y en este caso ha resultado a la larga también la más económica. Lo normal es que los padres paguen a escote y en este caso que sean sólo uno o dos los progenitores que vayan a comprar el regalo cada vez.

Y, claro, ante el jaleo de coordinar a una veintena de personas para un regalo conjunto, el progreso también ha aportado soluciones.Ya no es necesario verse físicamente ni siquiera facilitar el número de cuenta, la moda es pagar mediante sistemas de transferencia bancaria a través del número de móvil.

El más o uno de los más populares, Bizum, que se ha hecho con el sector de los pagos entre grupos de padres de WhatsApp. Y eso que surgió hace sólo unos años cuando una treintena de bancos españoles se unieron para lanzar una plataforma de pagos por móvil para hacer transferencias entre particulares.

Bizum permite realizar pequeñas transferencias entre clientes de diferentes bancos de forma gratuita. La opción está disponible en Caixabank, BBVA, Santander, Sabadell, Bankia, Popular, Kutxabank, Ibercaja, Bankinter, Liberbank, Laboral Kutxa, Cecabank, Cajasur, Imagin Bank, Oficinadirecta.com o Pastor.

Este servicio, que está integrado en la app móvil de cada banco, permite al usuario tanto realizar como solicitar pagos tan sólo conociendo el número de teléfono de la otra persona.Todos los padres o futuros padres que tienen una cuenta bancaria y un número de teléfono móvil podrán utilizar Bizum tan sólo dándose de alta en el banco y vinculando la cuenta al número de teléfono.

Bizum aprovecha la información que ya reside en el banco y utiliza sus canales, por lo que no implica introducir datos en una app. Por este motivo la solución está respaldada por los sistemas de seguridad de los bancos y cumple con los estándares y regulación bancaria en materia de pagos y de protección de datos.

¿Y cuando se termina el cumpleaños? A subir las fotos a la nube desde donde compartirlas con los demás usuarios, que deberán de pedir permiso explícito a todos los progenitores si tiene la intención de compartir imágenes del festejo.