¿Drones amigos o amenazas por el aire? La IA de la Universidad de Granada premiada por Defensa y en la que participó el Rey de España

La empresa pública de Sistema para la Defensa de España reconoce un trabajo que busca clasificar potenciales amenazas que lleguen desde el aire

El rey Felipe VI conoce el proyecto CASIA de defensa y seguridad, desarrollado por la Universidad de Granada

Un miembro del equipo de la UGR pilota un dron / UGR

Un grupo de investigadores de la Universidad de Granada (UGR) ha puesto a la Inteligencia Artificial a mirar al cielo. ¿El objetivo? Tratar de discernir qué drones pueden ser considerados como "amigos" y cuáles, potenciales amenazas, según explica Francisco Barranco, líder del equipo responsable del trabajo Clasificación de UAV basado en Inteligencia Artificial para dar soporte a sistemas de defensa antiaérea, que busca aplicar esta tecnología al sistema de Defensa y Seguridad nacional, pero que "se puede aplicar a cualquier sistema de seguridad".

El trabajo, premiado dentro del XII Congreso Nacional de I+D en Defensa y Seguridad (DESEi+d 2025), se enmarca dentro de lo que Barranco define como "IA utilizable", que busca que la tecnología sea aplicable a entornos reales, que no se queden solo en la teoría, de ahí que los responsables del proyecto hayan trabajado codo con codo con el Mando de Artillería del Ejército de Tierra, algo en lo que jugado un papel fundamental el MADOC, otra de las patas de equipo a través del CEMIX-UGR, el centro mixto entre el mando de adiestramiento y la Universidad.

A través del Ejército, los investigadores tuvieron acceso a las imágenes necesarias para "entrenar" el sistema, explica Barranco, además de conocer las necesidades del Mando, que muchas veces "son duales" y se pueden aplicar a más campos, prosigue el investigador.

También, durante el proceso para desarrollar el trabajo, los investigadores contaron con el asesoramiento de Felipe VI, quien pudo observar el funcionamiento del sistema desplegado e integrado en un entorno real durante el ejercicio Atlas 24, el Ejército de Tierra, el pasado año.

Felipe VI conoce el proyecto CASIA de defensa y seguridad, desarrollado por la Universidad de Granada / G. H.

El monarca rememora ahora Barranco, estuvo bastante tiempo "discutiendo con el equipo sobre el uso del sistema", recomendándoles utilizar una secuencia de imágenes en un lugar de una sola, pues "los drones no aparecen de la nada", explica el investigador de la UGR a este periódico, al tiempo que se asombra de cómo Felipe VI se fijó en detalles que el resto de militares no se había percatado.

El sistema desarrollado finalmente busca ayudar a la decisión para la clasificación de amenazas drones o UAV (Unmanned Aerial Vehicles o vehículos aéreos no tripulados) a partir de imágenes, para permitir a los operadores que tomen "decisiones informadas" sobre ese nivel de riesgo de estas amenazas en tiempo real, explica Barranco, que pone el énfasis en cómo la decisión recae en el factor humano: "Imagina que yo mismo le muestro al operador una serie de imágenes en las que se ven objetos en el cielo, y luego él decide qué hacer; es igual, pero ahora lo seleccionará la IA", trata de ejemplificar.

Un paso más en una Granada tecnológica

El premio al trabajo Clasificación de UAV viene a confirmar el avance que hace la ciudad de Granada en el ámbito de la IA, que ya recibió un fuerte espaldarazo con la inauguración del centro Ania, que contó con la presencia, entre otros, del presidente de la Junta de Andalucía.

Preguntado a este respecto, Barranco reconoce el avance que la Inteligencia Artificial está teniendo en Granada, pero destaca el carácter "utilizable" que el equipo que él lidera realiza sobre esta tecnología. "Nosotros nos dedicamos a optimizar los sistemas para que sean factibles en entornos reales".

También el investigador reconoce el miedo que puede sentir la ciudadanía ante el avance de la IA y la colocación de cámaras para controlar los cielos, pero llama a la calma asegurando que existe legislación pertinente sobre qué se puede grabar y qué no, y que la intimidad de las personas está a salvo; al tiempo que incide en que en el hardware que ellos utilizan no se almacenan imágenes sino "metadatos de lo que está ocurriendo".

Junto a Barranco, el proyecto ha salido adelante gracias al profesor Samuel Romero y los investigadores Iván Salinas y Álvaro Martínez, además de la colaboración de miembros del Ejército de Tierra como el Coronel Bonifacio Gutiérrez de León (MADOC) y el Capitán Jesús A. Molero (Mando de Artillería Antiaérea) y del CEMIX-UGR, el profesor Jesús Banqueri.

No hay comentarios

Ver los Comentarios

También te puede interesar

Lo último