Días complicados en las estaciones de servicio de la provincia de Granada. Desde hace días se acumulan conductores para hacer acopio de combustible ante el anuncio del fin del descuento de 20 céntimos por litro que aprobó el Gobierno el pasado mes de abril y la consiguiente subida del producto. Eso sí, la gasolina no subirá 20 céntimos. Se encarecerá más, entre 25 y 28 céntimos, indica el presidente de la Asociación provincial de Empresarios de Estaciones de Servicio, entidad integrada en Fedaes, la Federación andaluza, que a su vez forma parte de la Confederación española (CEEES), Fernando García.

"La situación de colas es generalizada en toda la provincia", indica García, que señala que las estaciones viven días de "caos". "Hemos tenido que recuperar a personal que estaba de vacaciones para poder atender" a los consumidores, conductores que quieren llenar el depósito antes de que la gasolina suba de golpe. 

Además de las colas, las estaciones han solicitado prácticamente a la vez el relleno de los tanques, lo que dificulta la gestión de la situación. Ninguna gasolinera quiere quedarse sin combustible de cara al día 31 de diciembre, explica el representante de la patronal del sector en Granada, que añade que el precio subirá entre 25 y 28 céntimos. A los 20 céntimos de subida por la supresión de la ayuda estatal se une que el porcentaje de biodiésel tiene que incrementarse en un 1%. Pasa de ser el 9,5% al 10,5% de la fórmula. Esta variación encarecerá el litro entre 5 y 8 céntimos. 

Más coches en una estación de servicio.

"Es una decisión antisocial", valora García sobre las medidas del Gobierno. El portavoz del sector alega que además no se ha consultado con las estaciones de servicio y que éstas se han visto al límite tanto cuando se implantó la medida como ahora, cuando se extingue. "Tuvimos que adelantar el dinero", explica sobre el comienzo del descuento de los 20 céntimos. García añade que hubo estaciones a las que se les pagó con hasta tres meses de retraso. 

"Nunca nos han escuchado", zanja García, que espera que el día 31 haya "colas y más colas" en las gasolineras. Son días de mucho tráfico, previos a festivo y con esta subida notable de precios. "Es un atraco al bolsillo", determina el representante de CEEES Granada, que insta al Gobierno a escuchar las demandas de las estaciones de servicio, como bajar el impuesto de los hidrocarburos, "una medida de la que nos beneficiaríamos todos".

Colas frente al surtidor.

"La inconcreción de la Administración acerca de qué sucederá con la bonificación de 20 céntimos por litro de carburante a partir del próximo 1 de enero de 2023 está sumiendo a las miles de pymes del sector de las estaciones de servicio en el caos más absoluto a poco más de una semana de Nochevieja", denunció en un comunicado CEEES. "La demanda de combustibles de automoción sigue estando muy por debajo de la que se registraba un ejercicio normal. Según el avance provisional de consumo correspondiente al mes de octubre elaborado por Cores, las ventas se sitúan un 4.6% por debajo de las de 2021 y son casi un 10% inferiores a las de 2019", indica la Confederación, que argumenta que "pese a ese menor consumo, el precio de los combustibles continúa siendo inasumiblemente elevado para los bolsillos de muchas empresas y particulares. La gasolina es un 7,5% más cara que hace un año, mientras que el gasóleo tiene un precio que es un 24% superior al que teníamos, de media, hace 12 meses", señala la Confederación en un comunicado.

El Gobierno ha eliminado la bonificación generalizada al combustible para el año 2023 y ha decidido mantenerla solo para el colectivo de profesionales, que incluye a transportistas, agricultores, navieras y pescadores, por lo que el descuento de 20 céntimos  desaparecerá este domingo 1 de enero para los clientes particulares.