Cada día somos más conscientes de que tenemos que cuidar el medio ambiente. En el mundo entero estamos llegando a niveles de preocupación alarmantes para la continuidad de la vida como la conocemos hoy en día. Y algunas de las causas de la polución en tierra, mar y aire las estamos sufriendo ya. Todos tenemos que mentalizarnos de cuidar el planeta, y como ya he dicho en otras ocasiones, la industria del vino y los destilados es una de las que más sensibles son a este problema.

Esta industria incide en disminuir la huella de carbono que genera su actividad a través el uso de energías y materiales renovables, integración en el medio natural y en general, respeto a la naturaleza.

Ron Flor de Caña es reconocido en el mundo de los expertos en  vinos y destilados por su exquisito sabor y aroma. Pero además es líder en materia de prácticas sustentables: trabajan con energía 100% renovable y siembran 50.000 árboles al año.

En este 2020, y en el día Mundial del Medio Ambiente, el pasado 5 de junio, el ron nicaragüense Flor de Caña recibió la certificación de carbono neutral de Carbon Trust.

Para lograr este importante certificación Flor de Caña debió medir y certificar la huella de carbono de todo el ciclo de vida de la bebida. Esta certificación además va de la mano de acreditación Fair Trade que tiene la marca por la que alienta al bienestar en la producción, cumpliendo con estrictos protocolos sociales y laborales. Es un sello de garantía de producto que certifica el cumplimiento de los estándares de comercio justo establecidos por Fairtrade Labelling Organizations International (FLO).

Desde 1913, por ejemplo, Flor de Caña brinda educación gratuita a los hijos de sus colaboradores y desde 1958, ofrece atención médica gratuita a ellos y a sus familias.

Flor de Caña, es reconocido como uno de los mejores rones de América Latina y es una bebida que además de todo el proceso productivo cuenta con adicionales que tienen que ver con la Naturaleza.

El ron es una especie de aguardiente obtenido por fermentación alcohólica y destilación del jugo de la caña de azúcar, o de melazas y subproductos de la fabricación del azúcar de caña.

El ron se convirtió en un producto importante de Las Antillas (Indias occidentales) tras la introducción de la caña de azúcar en 1493 por Cristóbal Colón.

Se menciona por primera vez en documentos provenientes de Barbados en 1650. Se la llamaba "killl devil" ("mata-diablo") o rumbullion (una palabra de Devonshire, Inglaterra, que significa "gran tumulto"): Ya en 1667 se le llamaba simplemente "rum", de donde proviene la palabra española ron y la francesa rhum.

En este ron, importado a España por Osborne, apreciamos aromas de piel de naranja, frutas deshidratadas como orejones, plátano, y especias como la pimienta. En el caso de los rones que han envejecido en barricas es común encontrar aromas de vainilla, cacao, café, caramelo o notas de tostado. Además tiene la especificidad de ser enriquecido por el Volcán San Cristóbal, a través de la tierra Volcánica, de la cenizas expulsadas constantemente por el volcán y con los minerales del agua que usa y se infiltran en las napas.

De todos es conocida la fama que tiene el ron como compañero ideal en el mundo del cóctel. Son incontables aquellos que cuentan con la presencia del ron, aunque uno de los más conocidos a nivel internacional es el Daiquiri que según los escritos fue descubierto por un joven ingeniero americano que trabajaba en esta población cubana y pasaba su tiempo libre mezclando todo tipo de ingredientes con ron, hasta que dio en la dina con la sencillez el zumo de limón, el azúcar, el hielo triturado… y el ron, claro está. Servido en copa de Dry Martini.

Esta sencilla muestra dio la vuelta al mundo bajo el nombre de "Daiquiri Floridita" cuyos principales promotores fueron Hernest Heminway y toda una colección de actores de la época.

Ilustre compañero de sobremesa, solo o con hielo o en coctelería, el ron es una de las joyas de los destilados americanos.