Dos detenidos por intento de violación tras quedar con dos chicas por Tuenti

Hay veces que uno debe pensar que a las redes sociales las carga el diablo. Quedar a ciegas, dependiendo de la persona con la que se decida interactuar en la vida real más allá de la pantalla de un ordenador, puede tener efectos contraproducentes e incluso peligrosos.

La estadística indica que, en igualdad de condiciones y sin conocer previamente al susodicho, se pueden dar varias posibilidades: que se trate de una bellísima persona, que sea un tipo de carácter normal o que sea un sujeto sin demasiadas buenas intenciones con ganas de darle la tarde a alguien.

Mientras se den las dos primeras hipótesis, el encuentro puede ser educado e incluso agradable, totalmente civilizado. Pero si el espécimen en cuestión con el que se decide quedar es uno de los comprendidos en la tercera de las posibilidades, una cita a ciegas puede terminar con los participantes en la comisaría por hechos poco edificantes, groseros o directamente deleznables.

Es lo que deben pensar las dos jóvenes a las que otros dos chicos presuntamente intentaron agredir sexualmente la tarde noche del pasado miércoles. La cita se había concertado a través de la red social Tuenti, esa que es usada preferentemente por adolescentes y menores de 20 años. Pocos datos han trascendido sobre las circunstancias de lo sucedido. Pero los hechos se saldaron con dos detenidos, uno de ellos menor, imputados por una agresión sexual en grado de tentativa. O lo que es lo mismo, un intento de violación.

Según fuentes de los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado, ese intento de violación tuvo lugar el pasado miércoles, en un lugar entre el parque de bomberos de la zona Norte y el centro comercial Alcampo. Las chicas, muy asustadas, alertaron a una dotación de la Policía Local que patrullaba junto al centro comercial y contaron a los agentes que los jóvenes intentaron abusar de ellas, según han explicado fuentes municipales.

Asimismo, las menores aseguraron contar con datos suficientes para localizar a los jóvenes, ya que tenían constancia de que uno de ellos vivía en la localidad de Albolote. Al no tener competencias para intervenir en estos presuntos hechos delictivos, los agentes de la Policía Local pusieron en contacto a las menores con la Policía Nacional, de modo que un grupo especializado de este cuerpo se ha hecho cargo de la investigación.

Además de los datos con los que contaban las chicas, los agentes obtuvieron información a través de los perfiles de la red social, por lo que pudieron detener a los jóvenes. Uno de ellos, menor de edad, quedó a disposición de la Fiscalía de Menores, que ayer le tomó declaración, según informaron fuentes del caso, tras lo que decretó su ingreso en un centro de internamiento de menores mientras dura la investigación y a la espera de juicio.

El otro, mayor de edad -18 años y unos meses-, quedó bajo la custodia de la Policía Nacional, que a su vez lo puso a disposición del juzgado en funciones de guardia de la capital que, finalmente, ordenó su ingreso provisional en la cárcel provincial de Albolote.

A ambos, según las fuentes consultadas por este periódico, se les acusa de un presunto delito de agresión sexual en grado de tentativa.