Los detenidos del 15-M quedan libres en vísperas del 'gran día'

Los dos simpatizantes del movimiento 15-M que fueron detenidos el domingo en la Plaza del Carmen quedaron ayer en libertad tras pasar la noche en la comisaría y la mañana en los juzgados de La Caleta.

Los detenidos, que fueron acusados de resistencia a la autoridad por entender la policía que les habían increpado cuando les pidieron que se identificasen, no pudieron declarar el domingo ante el juez de guardia porque, según fuentes policiales, no se le pudo localizar. Como los arrestados se negaron a prestar declaración en dependencias policiales, lo que se decidió fue que durmieran allí y trasladarlos por la mañana al juzgado.

Mientras tanto, un grupo de 300 personas se concentró en la puerta de la Subdelegación del Gobierno y cortaron la Gran Vía para exigir su liberación. La protesta no había sido previamente autorizada, pero aun así los policías no la interrumpieron. Comenzó a las nueve de la noche y los últimos manifestantes abandonaron el lugar a las 23:45 horas. El tráfico tuvo que ser desviado.

Por la mañana comparecieron ante el Juzgado de Instrucción número 9, en funciones de guardia, y allí tanto el fiscal como el juez dijeron que no veían indicio de delito en su actuación sino, en todo caso, de falta.

En consecuencia, fueron trasladados al juzgado número 6, encargado ayer de los juicios de falta inminente. Pero en realidad tampoco hubo un juicio contra ellos porque el ministerio público, tras revisar la causa, no apreció que hubiera ningún argumento para presentar acusación. Como el juez opinó de la misma manera, dictó su absolución y ambos quedaron en libertad sin cargos.

Fuera habían estado esperando en torno a cien simpatizantes de la causa, que en esta ocasión no cortaron el tráfico y se limitaron a exteriorizar su protesta con diversos lemas en favor de sus compañeros.

Posteriormente anunciaron que están estudiando denunciar a la Subdelegación del Gobierno por posible detención ilegal por mantener a los detenidos toda la noche en la comisaría.

Así lo aseguró el miembro del grupo de Seguridad Legal del 15M y abogado Pepe Iglesias, que asegura no entender que los dos arrestados "hayan pasado la noche en el calabozo porque ya podían haber sido puestos en libertad ayer y se ha hecho perder el tiempo al juez y a la Policía". Agregó que la absolución demuestra que la Policía y la Subdelegación "han fracasado en un nuevo intento de criminalizarnos".

A las siete de la tarde de ayer, los indignados regresaron a la Plaza del Carmen para retomar su programa de actividades y asambleas. Culminarán hoy, día en el que se cumple el primer aniversario de la serie de manifestaciones que se realizaron en toda España y que sorprendieron por lo multitudinarias y por lo heterogéneo de sus integrantes.

Los congregados aseguraron que iban a cumplir lo que acordaron el domingo: no acamparían en la plaza donde está el Ayuntamiento porque, como argumentaron entonces, no es algo fundamental para sus intereses.

Se limitarán a algo a lo que sí tienen derecho (y la Policía Nacional así se lo reconoce) que es a reunirse en una plaza pública para debatir asuntos de su interés.