doulas Controversia de una figura emergente

La polémica por el informe publicado por el Consejo General de Enfermería pone de relieve la falta de una regulación de una figura con demanda en los paritorios

Rocío abraza a Unai segundos después de que naciera en su domicilio, ante la atenta mirada de Nacho.
S. Vallejo · N. Márquez Granada

24 de febrero 2015 - 01:00

¿Sabe lo que es una doula? Quizá sea la primera vez que escuche este nombre pero su función está cada vez más extendida y ha puesto en pie de guerra a un colectivo entero, el de las matronas, por intrusismo profesional. El motivo ha sido la publicación hace unos días de un informe del Consejo General de Enfermería (Informe sobre competencias de matronas y tareas que realizan las doulas) en el que se carga contra las doulas, lo que ha abierto el debate sobre cómo asistir al parto y la libre elección de los padres.

La palabra doula no aparece en el Diccionario de la Real Academia Española. En otros diccionarios aparece como palabra griega que significa "mujer que sirve a otro". El Oxford Dictionaries la define como una "mujer que da a poyo, ayuda y asesoramiento a otra mujer durante el embarazo, durante el parto y después del parto". Una función que las matronas consideran que invade sus competencias y que denuncian que, además, se hace sin formación.

En la actualidad, la doula es una mujer que acompaña a la madre emocionalmente durante el embarazo, parto y puerperio, asesorando y apoyando las decisiones de la mujer. Pero el Consejo de Enfermería dice que van más allá y que dan atención y asesoramiento para el que hace falta formación sanitaria específica que no tienen, por lo que las acusan incluso de poner en riesgo la salud de las madres y de los recién nacidos.

En España hay medio millar de doulas, fundamentalmente asociadas a dos entidades nacionales: la Asociación Red Circular de Doulas y la Asociación Española de Doulas. Una de las cofundadoras de la Red Circular de Doulas es la granadina María José Mochón, que ejerce desde 2008 en la zona de Baza. Mochón dice que el informe es un ataque directo contra la decisión de las mujeres que quieren estar acompañadas por esta figura y que, en contra de lo que dice el informe, no ponen en riesgo la salud de nadie. "Una doula no es personal sanitario. Nosotros somos acompañantes porque una mujer durante el embarazo y el parto necesita apoyo. Y nosotros le ayudamos a abrir su espacio y que haga lo que quiera: reír, llorar o decidir por ella misma. La madre pasa por una revolución emocional y lo que hacemos es dar apoyo para que decida con lo que se siente mejor", explica. Además, dice que la doula no actúa nunca en solitario y que siempre se tiene el acompañamiento de matronas y personal sanitario en los partos. De hecho, su presencia no se circunscribe sólo a los partos en los domicilios sino que están también en los hospitales, aunque depende de la sensibilización de los equipos médicos. "Si se hace la atención sin personal sanitario, no es una doula", sentencia Mochón, que reconoce que, como en todo, hay diferentes tipos de doulas, aunque no responden por las que ejercen una mala práctica o se exceden en sus competencias.

Las doulas defienden de hecho que su trabajo es de meras acompañantes y consejeras y que su labor va más allá de los domicilios, de lo que se pueda entender por un parto natural en casa. "Hay equipos en hospitales que trabajan incluso con doulas. Depende del centro y del equipo", explica. Y denuncia que el informe del Consejo de Enfermería está lleno de "imprecisiones y calumnias". "Nos tachan incluso de caníbales por la práctica de comer placenta. Pero parece que se come con cuchillo y tenedor. Y no es así. Los padres que lo deciden han leído mucho sobre eso y sus ventajas por la aportación de hierro para la madre tras el parto. Es un trozo mínimo que se puede preparar, por ejemplo, con zumo de naranja. Hay muchos blog de matronas que también lo recomiendan", argumenta la doula, que desde 2008 ha acompañado en seis partos (dos en el hospital y cuatro en casas).

Sobre el lugar del parto, las doulas dicen que en la preparación del momento durante el embarazo se realizan sesiones también con matronas y se decide el lugar más idóneo. "No cualquier madre puede dar a luz en casa. Hay cinco entrevistas antes del parto con matronas y se analiza hasta la situación del hogar y la posible evacuación al hospital ante una urgencia. Hay protocolos y lo que dicen las matronas y los profesionales siempre cuenta", asegura. En Granada, por ejemplo, trabajan con el grupo Ocean de matronas a domicilio.

Rocío López de la Chica es una madre que dio a luz el 17 de diciembre de 2013 en su casa con la asistencia de una matrona privada y una doula. "Para dar a luz en mi casa realicé un curso de cuatro meses en los que me formé y me preparé tanto física como emocionalmente", explica. "Fue una experiencia preciosa y repetiría", dice.

Lo que ese documento del Consejo de Enfermería denuncia es que están siendo invadidas ocho competencias generales, diez específicas y 42 complementarias. Además denuncian que "no constituyen profesión sanitaria alguna" ya que no cumplen con los requisitos establecidos en el artículo 2 de la Ley de Ordenación de las Profesiones Sanitarias: No cuentan con formación pregraduada o especializada, no están organizadas en colegios profesionales, no pueden ser consideradas como profesionales del área sanitaria. De hecho, han reclamado al Ministerio de Sanidad, que en su "Estrategia de atención al parto normal en el sistema nacional de salud" incluye menciones a la figura de las doulas como personal sanitario, que lo elimine.

Sobre la formación, María Jesús Mochón confirma que no está reglada y que es algo por lo que están peleando. Hasta ahora, reciben formación anual con ginecólogos, matronas o psicólogos, pero depende de cada persona lo que quiera profundizar. "Después, para entrar en la red se hacen entrevistas en las que se ven las aptitudes y capacidades", relata. Además, defienden que en países como Holanda o Inglaterra están integradas en el sistema sanitario.

El Consejo de Enfermería defiende la formación (de hasta 12 años) que se pide a las matronas y sus funciones en la atención al embarazo, parto y puerperio. En su propia definición lo incluyen: "profesional sanitario que proporciona una atención integral a la salud sexual, reproductiva y maternal de la mujer, incluyendo así mismo la atención a la madre en el diagnóstico, control y asistencia del embarazo, parto y puerperio normal y la atención al hijo recién nacido sano hasta el 28 día".

Entre las competencias que creen 'violadas' está toda la información a la madre, la preparación prenatal, la realización del plan de parto, la información en el embarazo o la asesoría en materia de alimentación y hábitos saludables. También el apoyo en los preparativos del parto, la información de dudas o la selección del tipo de lactancia. El manejo del dolor en el parto, las posturas, el conteo de las contracciones, el acompañamiento de la madre, técnicas de relajación o consejos sobre el cuidado del bebé son otras tareas que las matronas consideran que superan sus competencias. "Apoyar una decisión sin la debida formación implica poner en riesgo la salud de la madre y del hijo si la mujer no tiene la información correcta y toma una decisión equivocada", dicen.

Los honorarios de las doulas dependen, pero pueden ir desde 40 euros al mes por asesoramiento por internet hasta los 1.200 por la atención al parto y postparto.

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