Granada

Los empresarios del Albaicín alertan de la caída del turismo 'familiar' en el barrio

  • La asociación Aehras elabora un informe de la situación actual de la zona y advierte de las consecuencias que está teniendo para el núcleo turístico la peatonalización que se ha realizado desde el Ayuntamiento

El Albaicín es mucho más que el Paseo de los Tristes, el Sacromonte o el propio Mirador de San Nicolás. El barrio Patrimonio de la Humanidad es un "todo" que, actualmente, se encuentra dividido por accesos de tráfico restringidos, otros permitidos, otros peatonales y algunos, hasta desconocidos.

La cadena de cambios de tráfico y direcciones que se han realizado en los últimos meses no está carente de consecuencias. Las últimas decisiones municipales -caso de la peatonalización del Darro- han motivado que la Asociación de Empresarios de Hostelería y Restauración del Albaicín y Sacromonte (Aehras) elabore un informe en el que pone al día la situación del barrio y que alerta de los aspectos contrarios que todas las modificaciones están causando, una de ellas, vital para los empresarios como es la caída del llamado turismo "familiar".

"No hablamos de los grupos y viajes organizados que tienen a sus guías que los llevan y los traen por donde quieren sino de las familias, parejas con hijos que con los últimos cambios de tráfico y direcciones se quedan en el Darro y poco más. Directamente pasan de tomar un autobús que les dé la vuelta a media ciudad para ver todo lo que falta del barrio", explican desde la asociación.

Desde Aehras -que aglutina cerca de una veintena de establecimientos hoteleros y de restauración del barrio- consideran que los responsables no deben olvidar que, aunque el recinto del Albaicín sea un espacio protegido, "debe ser cómodo" tanto para los habitantes como para los turistas por lo que "un transporte adecuado y una información clara y sencilla que lo publicite es esencial".

En este sentido, en el informe se apunta que "las actuaciones que puedan deteriorar el modo de vida son censurables" algo que muchos de los residentes consideran que se ha hecho al peatonalizar y "dejar medio aislado al barrio, al menos, de transporte público".

La asociación insiste en que las medidas de turismo que ellos reclaman ya se apuntaron en el Congreso Internacional de Granada sobre Gestión Integral del Turismo en Ciudades Monumentales (2002) donde se alertó que "las infraestructuras, tanto turísticas como culturales, deben dimensionarse de forma correcta para que realmente sirvan para mejorar la calidad de vida de los residentes y ofrezcan espacios atractivos a los visitantes" y no al contrario.

La idea tanto de los empresarios como de los vecinos que viven en el Albaicín es que se realice una "revitalización funcional" en el que los centros históricos podrán seguir siendo realidades multifuncionales, impulsen actividades turísticas y culturales y desempeñen un papel relevante en las estructuras urbanas del siglo XXI.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios