Estafa, hurto y apropiación indebida. Son los tres ilícitos que la Fiscalía de Granada ha determinado que cometieron dos hombres que se hicieron con la confianza de dos hermanas, ancianas las dos, y a las que presuntamente expoliaron su patrimonio. Por ello, el Ministerio público solicita más de once años de cárcel para los dos acusados, que serán enjuiciados los días 19 y 20 de diciembre en la Audiencia Provincial de Granada.

Los acusados, siempre según el relato del Fiscal, se hicieron con la confianza de una de las mujeres, de 79 años en el momento de los hechos. Trabaron conocimiento con ella tras la reforma del sistema de calefacción que se realizó en el bloque de pisos de Granada en el que residía la mujer, enferma de Alzheimer. Los dos hombres, "con ánimo de embaucar y ganarse la confianza" de la víctima, "venían a verla con cierta asiduidad". En un momento dado, comenzaron a ofrecerse para hacer distintas tareas, desde ir a la compra a pequeños arreglos en el domicilio. Lo que podría entenderse como un acto loable, de ayuda a una mujer mayor, tenía, presuntamente, una finalidad bien distinta.

Una vez ganada su confianza, "convencieron" a la mujer de la necesidad de firmar un poder general de disposición a favor de los dos acusados, que posteriormente crearon una "empresa ficticia" a la que "iban a traspasar todos los bienes que fraudulentamente iban a adquirir" de la anciana, que era desconocedora, según la Fiscalía, de lo que habían tramado.

Así, el escrito de la Fiscalía señala que se vendió el piso en el que residía la demandante por un precio "muy inferior" al de la tasación a la empresa creada para ello. El  cheque con el que se pagó parte de la venta "nunca fue cargado en la cuenta de la entidad compradora" ni se "ingresó en la cuenta" de la mujer "el importe de dicho cheque".

Además, imitaron la firma de la víctima en un cheque bancario de 60.000 euros "en concepto de pago de una supuesta deuda que ha resultado del todo inexistente. A través de la misma empresa compraron presuntamente dos plazas de garaje que pertenecían a la denunciante. "El cheque no se cargó nunca" ni la mujer recibió ni un euro, indica la Fiscalía-

Posteriormente se formalizó ante notario la compraventa de dos fincas rústicas y un local en un pueblo de Granada. Además de estas operaciones, el Ministerio público asegura que sustrajeron una serie de joyas y mobiliario, propiedades tasadas en 80.000 euros "y que no han sido recuperadas" de las viviendas de la denunciante y de la hermana, también enferma. Con motivo de unas obras en el baño de esta segunda víctima los dos acusados se habían hecho supuestamente con las llaves del chalé en el que residía y del piso de alquiler al que se fue a vivir por su dolencia. 

Además de estas actuaciones enumeradas por la Fiscalía, los acusados también intervinieron para hacerse presuntamente con parte del patrimonio de la hermana de la denunciante. Así, cuando ésta se encontraba en el hospital "afectada por distintos tumores que la llevaron a su fallecimiento", consiguieron que nombrara a la denunciante heredera universal "ello para conseguir expoliar todo el patrimonio".

Una vez fallecida la anciana, consiguieron que la denunciante firmara distinta documentación por la que la mujer reconocía deudas con la empresa ficticia "prevaliéndose de la ignorancia, avanzada edad y minusvalía psíquica" de la presunta víctima. Se quedaron también con los enseres de la finada, muebles, vestidos y joyas que guardaron en la nave de una tercera persona.

La Fiscalía atribuye a los acusados un delito continuado de estafa con falsedad continuada de documento público mercantil; un delito continuado de hurto por las joyas sustraídas; y un delito de apropiación indebida por quedarse presuntamente con el vehículo de la hermana fallecida.

Por todo ello el Ministerio Público solicita una pena de ocho años de cárcel por estafa, otro año y medio por hurto y dos años más por apropiación indebida. En total, once años y medio de prisión, más una multa de unos 8.600 euros, a razón de doce euros por día durante dos años.