Granada avanza en el control del ruido con un cambio en la ordenanza y el visto bueno de la Junta al mapa acústico de la ciudad

El Ayuntamiento de Granada ha dado un nuevo paso para avanzar en el control del ruido de la ciudad para garantizar el descanso ciudadano. En comisión informativa se ha aprobado la modificación de la Ordenanza del Medio Ambiente Acústico para derogar su artículo 14, que no casa con la normativa autonómica, de mayor rango y por tanto prevalente pero de esta forma se gana seguridad jurídica en la capital. Según la concejala Ana Agudo, para este equipo de gobierno “controlar el nivel de ruido en la ciudad es una prioridad en la medida que mejorar las condiciones ambientales, tanto de contaminación ambiental como acústica, son una herramienta clave para mejorar la salud de nuestra ciudadanía”.

Además, se ha recibido de la Junta información favorable al mapa de ruidos tras dos años desde su realización y esperando este visto bueno. Ahora se podrá acometer la fase IV con un plan de acción contra el ruido para cumplir los plazos de los fondos obtenidos para el plan, que fijaba que había que tenerlo para primeros de año.

Con todo esto, se podrá seguir la tramitación de las Zonas Acústicamente Saturadas (ZAS) tras las mediciones realizadas y acordar medidas en ellas para normalizar la convivencia ciudadana.

La edil ha enmarcado la derogación del artículo 14 dentro de las líneas de trabajo “en todas las cuestiones relativas a la gestión del ruido” impulsadas por el gobierno municipal para garantizar la conciliación de la actividad empresarial y económica con el derecho al descanso de la ciudadanía, entre las que ha citado la finalización y aprobación del Mapa Estratégico de Ruido, una obligación normativa que se completó el pasado año en la que se incluyen los niveles de ruidos causados por tres fuentes: actividades industriales, tráfico ferroviario y tráfico rodado.

Asimismo, se ha referido a las mediciones realizadas, en este caso conforme al Reglamento de preservación de la Calidad Acústica en Andalucía, en las áreas con mayor número de reclamaciones vecinales relacionadas con actividades de ocio, calles Ganivet, Moras y Pedro Antonio de Alarcón, de las que se recogieron “niveles de ruido durante el periodo de muestra superiores a los límites establecidos por la legislación: Ganivet, como turístico, y Pedro Antonio de Alarcón, residencial”.

Según ha informado, “en base a estos niveles detectados se ha desarrollado el trabajo técnico correspondiente, que desde el principio estuvo alineado con el reglamento autonómico, como marco normativo que ampara la intervención”.